'El 71', según Jorge Fornet

Portada del libro 'El 71, Anatomía de una crisis'.
Portada del libro 'El 71, Anatomía de una crisis'.
José Gabriel Barrenechea

28 de junio 2014 - 15:30

La Habana/Acabo de leer uno de los libros más interesantes que se haya publicado en Cuba en los últimos 43 años. El 71, Anatomía de una crisis de Jorge Fornet, no solo disecciona con maestría una época, sino que lo hace desde una posición para nada coincidente con la del Gobierno y alcanzando un alto nivel de seriedad, profundidad y amenidad.

Aparte del dato nada despreciable de haber sido publicado en la Cuba de Raúl Castro, este volumen interesará a los lectores por su rigor, pero también por la valentía que demuestra el hecho de haberlo escrito y dado a la imprenta. Algo que se agradece en un país donde suele haber mucho de lo segundo, pero muy poco de lo primero entre quienes adoptamos una posición crítica.

Publicado por la editorial Letras Cubanas, en una tirada ridícula, este libro se enfoca en los acontecimientos que tuvieron como eje a la Cuba de 1971. Constituye entonces una historia de la desilusión de la vanguardia intelectual occidental con la Revolución Cubana.

Sin embargo, El 71 es más y menos que eso. Es también la historia de los acontecimientos cubanos, entendidos en su lógica interna. Una Isla en medio de la descolonización y de los movimientos juveniles, que le dieron el definitivo empujón al mundo intelectual occidental para cambiar de mano, al menos hasta el final de la Guerra Fría.

En el libro se narra con bastante prolijidad el desarrollo de los acontecimientos a partir de enero de 1968, en que durante el Congreso Cultural de La Habana se llegó al momento de mayor simbiosis entre poder revolucionario e intelectuales occidentales. Y hasta el mes de abril de 1971, en que con las soberbias palabras de Fidel Castro ante el Primer Congreso Nacional de Educación y Cultura se produjo la ruptura.

Esta es por tanto una historia intelectual, pero cosa rara en Cuba donde los intelectuales no suelen salirse de su área, no se cierra sobre sí misma. No se reduce a la complicada interacción entre régimen e intelectuales occidentales, con los intelectuales nacionales jugando a su vez un inestable y peligroso papel en el medio. Todo el proceso aparece analizado también desde la economía, la política, y hasta la demografía.

En este sentido el libro no tiene al poeta Heberto Padilla como el personaje principal, a pesar de que es él quien sirve para enfocar la evolución intelectual interna en Cuba. Tampoco el protagonismo recae en la figura de Fidel Castro. Los actores principales de este libro son los dos bandos en disputa.

Un libro que se agradece sobre todo por lo que escribe el autor en las últimas líneas de su Epílogo:

"El 71 (...) fue un punto de inflexión de buena parte de nuestra historia cultural, y continuará pesando sobre ella cuando muchos de los hechos abordados en estas páginas no sean sino anécdotas extraviadas en la memoria. (...) Este libro es un intento por tratar de entenderlos y de ubicarlos, desde el epílogo que es nuestro presente, en el centro de una discusión inconclusa".

También te puede interesar

Lo último

stats