La deportación de los cubanos en Turbo es inminente
Miami/La presencia de más de 1.200 cubanos en el municipio costero de Turbo, en la región de Antioquia, tiene las horas contadas, según dijo este martes a 14ymedio Wilson Patiño, director regional de Migración Colombia. "No habrá ningún vuelo humanitario a México. Quiero dejarlo claro", insistió el funcionario para quien la única solución es que los migrantes se devuelvan por la frontera por donde entraron al país.
Desde horas tempranas de hoy, un nutrido grupo de policías y funcionarios de Migración se encuentra en las calles de la localidad y ha urgido a los migrantes que desalojen voluntariamente la bodega.
"Ya se les había orientado que desalojaran la bodega de manera voluntaria y no lo han querido hacer, por eso se les advirtió hoy de que se pondrá en marcha lo que dice la Constitución", aseguró Patiño, que negó que se les hubiera dado 24 horas para desalojar el almacén, algo que los migrantes sostienen en las redes sociales.
"Tenemos un problema de salubridad. Ya se hicieron todos los trámites y México dijo que no los recibiría. A nivel central se están manejando los pasos para dar solución a este problema. Vamos a tomar acciones más contundentes para que se desaloje la bodega y sus alrededores. Por el momento se están haciendo las verificaciones correspondientes", explicó.
El director regional de Migración cree que la única solución es que los migrantes se devuelvan por la frontera por donde entraron al país
El alcalde de Turbo, Alejandro Abuchar, dijo a 14ymedio que este martes hubo un consejo de seguridad con el gobernador de Antioquia, Luis Pérez Gutiérrez, donde se entregó a Migración Colombia la orden presidencial para la evacuación de la bodega y del municipio. "Probablemente se les dará unos ocho días para que salgan del país y, si se niegan, la orden del presidente Juan Manuel Santos es clara: la deportación de todos", agregó el funcionario.
Ricardo Ramírez, uno de los cubanos que viajó desde Ecuador, cree que la medida es terrible. "No tengo para donde ir, salí hace más de tres años de la Isla. No sé qué podré hacer si me deportan. Para Cuba no voy a ir y, si me llevan, será para hacerle la vida un talco a Raúl Castro", dijo.
"Dudo de que me puedan deportar, porque desde Ecuador no lo pudieron hacer", comenta Ramírez, quien estuvo preso en el hotel Carrión y hoy pernocta en una casa de plástico, construida por él mismo junto a la bodega privada en la que se refugian los cubanos.
"Están dejando entrar pero no salir de un perímetro que tienen marcado alrededor del albergue. La tensión es tremenda. La mayoría de la gente cree que se trata de ejercer presión psicológica para que nos vayamos. Ya hoy se han ido más de 30 en lanchas hacia la frontera panameña", comentó.
Este lunes un grupo de artistas e intelectuales cubanos en el exilio se solidarizaron con los migrantes enviando una carta abierta al presidente de Colombia, pidiéndole que dejara continuar su viaje a los isleños.
La pasada semana, la Defensoría del Pueblo realizó un censo voluntario, según el cual en la bodega y sus alrededores se encuentran 1.273 cubanos, de los cuales más de 300 son menores de edad y más de una veintena requiere atención urgente de salud. El alcalde de Turbo declaró el estado de calamidad pública y Santos advirtió de que se trabajaba en función de deportar a los cubanos.