Fariñas sale del hospital y Carlos Amel Oliva es atendido tras huelga de 25 días
La Habana/(EFE).- El opositor cubano Guillermo Fariñas, en huelga de hambre y sed desde hace 17 días, se encuentra este sábado en casa tras recibir atención en una clínica de la central ciudad de Santa Clara, mientras que el también disidente Carlos Amel Oliva permanece hospitalizado en la oriental Santiago de Cuba tras 25 días de ayuno.
Fariñas, de 54 años y premio Sájarov 2010 del Parlamento Europeo por la defensa de los derechos humanos, fue llevado ayer por segunda vez al hospital provincial “Arnaldo Milián Castro” desde que iniciara su protesta, y tras ser hidratado recibió el alta por decisión de los médicos, dijo a Efe el activista Rolando Ferrera.
Ferrera, coordinador del Frente Antitotalitario Unido (Fantu) que lidera Fariñas, indicó que en estos momentos el opositor experimenta mucho “decaimiento” y “deterioro físico”, por lo que se pasa casi todo el tiempo “tumbado en la cama durmiendo”, aunque pretende seguir su ayuno hasta las “últimas consecuencias”.
El psicólogo y periodista independiente fue ingresado el 28 de julio, también tras desmayarse, y al día siguiente pidió el alta voluntaria.
Fariñas acumula desde 1995 un total de 25 huelgas de hambre, la última hasta ahora en 2010, cuando hizo cien días de ayuno, la mayor parte de ellos hospitalizado, para pedir al Gobierno la liberación de un grupo de opositores presos enfermos.
El pasado 20 de julio inició una huelga de hambre y sed para exigir al Gobierno cubano el cese de la represión contra los disidentes y un diálogo con la oposición, estrategia secundada por otros once opositores, la mayoría de ellos pertenecientes a la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu).
Oliva permanece en el Hospital “Juan Bruno Zayas” de la ciudad de Santiago de Cuba, al oriente de la isla, donde fue hidratado vía intravenosa y ya recobró el conocimiento
El primero de ellos fue el coordinador juvenil de la Unpacu, Carlos Amel Oliva, hospitalizado hoy en la oriental Santiago de Cuba tras 25 días de ayuno, después de que agentes de la policía y la seguridad del Estado entraran en su domicilio e incautaran objetos personales como ordenadores, teléfonos móviles y discos duros.
Oliva permanece en el Hospital “Juan Bruno Zayas” de la ciudad de Santiago de Cuba, al oriente de la isla, donde fue hidratado vía intravenosa y ya recobró el conocimiento, explicó a Efe su esposa Katerine Mojena.
En estos momentos su “ánimo es pésimo”, “prácticamente ni habla” y su “pulso y presión están muy bajos”, indicó Mojena, que además aseguró que Oliva seguirá su ayuno “hasta que el Gobierno no le devuelva sus pertenencias”.
Según los datos de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) -que sigue la evolución de estos opositores en huelga de hambre- en lo que va de año se han contabilizado más de 7,300 detenciones por motivos políticos, en muchos casos con violencia.
En julio específicamente el grupo opositor registró al menos 845 detenciones, lo cual ven como un “repunte represivo” en comparación las 498 ocurridas en el anterior mes de junio.
En su informe mensual, la CCDHRN insistió en la “preocupante” situación de Guillermo Fariñas y de la otra decena de opositores de la isla se mantienen en ayuno absoluto.
El Gobierno de Cuba considera a los disidentes “contrarrevolucionarios” y “mercenarios”.