Daniel Llorente cambia la bandera de EE UU por un cartel contra "la dictadura de Raúl Castro"
El hijo del activista no pudo visitar a su padre en el hospital psiquiátrico este domingo por estar bajo castigo tras una protesta
La Habana/Daniel Llorente, el "hombre de la bandera", no pudo recibir visitas este domingo en el hospital psiquiátrico de La Habana, porque está bajo castigo tras protestar en el patio del centro hospitalario con un cartel, confirmó su hijo a 14ymedio.
En la entrada del Hospital Psiquiátrico Comandante Doctor Eduardo Bernabé Ordaz Ducungede, conocido popularmente como Mazorra, los custodios impidieron a Eliezer Llorente entrar al recinto y entrar al recinto porque su padre estaba castigado.
El miércoles pasado Daniel Llorente, quien cumplirá 10 meses de encierro el 1 de marzo, salió al patio con un cartel que decía "No a la injusticia, abajo la dictadura de Raúl Castro". La acción de protesta ocurrió después de pasar varios días incomunicado, es decir sin poder salir al área común ni usar el teléfono de la instalación.
Días antes Llorente había sido sometido a un registro minucioso en el que le retiraron un teléfono móvil que había logrado entrar "a escondidas" para mantener comunicación con su hijo. "También están molestos por unos escritos a lápiz que ha puesto en las paredes de su sala con textos de José Martí", asegura el joven.
La acción de protesta de Llorente ocurrió después de pasar varios días incomunicado, es decir sin poder salir al área común ni usar el teléfono de la instalación
Este fin de semana Eliezer Llorente reclamó hablar con los superiores de la institución y fue recibido por la subdirectora. La funcionaria le explicó que el castigo de su padre era solo por una jornada y que el próximo miércoles podría ir a visitarlo "sin problemas".
"Mi padre está actuando así también porque ellos no están cumpliendo la ley al tenerlo ahí encerrado, pero ella me dijo que ya mandaron su cese de medida cautelar al tribunal pero allá lo negaron", cuenta Eliezer.
El jueves el joven fue citado para la estación policial de Santiago de Las Vegas donde le devolvieron la tarjeta telefónica y lo amenazaron con llevarlo ante un tribunal y acusarlo de "desobediencia", asegura. Tuvo que firmar un acta de advertencia con el compromiso de no volver a entrar a la instalación con la tarjeta de teléfono.
El activista se encuentra atrapado en un limbo legal porque las autoridades hospitalarias no pueden darle el alta médica del psiquiátrico sin antes recibir el visto bueno del tribunal. Sin embargo, a pesar de no estar siendo procesado por ningún delito, las instancias legales no acaban de firmar la autorización.
Daniel Llorente Miranda se ha destacado por el activismo que desplegó en solitario tras el deshielo diplomático entre Cuba y Estados Unidos
Daniel Llorente Miranda se ha destacado por el activismo que desplegó en solitario tras el deshielo diplomático entre Cuba y Estados Unidos. Su imagen recorrió las redes sociales y las portadas de muchos diarios internacionales cuando enarboló la bandera de EE UU durante el desfile del primero de mayo de 2017 en la Plaza de la Revolución.
Siete agentes de seguridad se abalanzaron sobre él y lo redujeron por la fuerza. Desde ese momento está detenido, aunque durante el primer mes las autoridades lo mantuvieron en la Dirección de Operaciones de la Seguridad del Estado (Villa Marista) y posteriormente fue trasladado a Mazorra.
Considerado un opositor "por cuenta propia" Daniel Llorente se caracteriza por aparecer en eventos públicos con la enseña norteamericana para reclamar un mayor acercamiento con el país vecino y democracia para Cuba.
La primera vez que agitó públicamente la bandera de EE UU fue durante la reapertura en La Habana de la embajada de ese país en 2015. Al año siguiente volvió a hacerlo en el contexto de la visita a Cuba del presidente estadounidense, Barack Obama. Más adelante fue detenido durante varias horas después de recibir con su bandera al primer crucero que llegaba desde EE UU después de medio siglo.
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