Ningún representante oficial asiste al conversatorio con Tania Bruguera
La artista cubana Tania Bruguera ofreció este viernes en la tarde un conversatorio en su domicilio para ofrecer su propia versión de lo ocurrido el 30 de diciembre, alrededor de la performance El Susurro de Tatlin #6.
El encuentro tuvo como objetivo contrarrestar un material audiovisual producido por la Seguridad del Estado y el Ministerio de Cultura contra Bruguera, que se está mostrando a otros artistas e intelectuales cubanos.
El conversatorio tuvo lugar en la calle Tejadillo #214 entre Aguacate y Compostela y contó con la asistencia de unas 40 personas, entre ellos varios activistas y periodistas independientes. También estuvieron presentes proyectos artísticos independientes como la galería El círculo, Cristo Salvador y miembros del grupo Omni Zona Franca.
"los artistas cubanos tienen muy claro la linea que no se puede pasar, una de ellas es que no se puede hacer nada con la disidencia".
Tal y como había anunciado en la convocatoria, Bruguera respondió dudas y narró los sucesos que vivió a finales del año pasado. Contó como la habían obligado a vestir con el uniforme de presa y su decisión de no probar alimento durante las horas en que estuvo arrestada. Ahondó también en los detalles del registro de pertenencias del que fue víctima y de la actual campaña de difamación en su contra. En sus declaraciones, enfatizó que "los artistas cubanos tienen muy claro la linea que no se puede pasar, una de ellas es que no se puede hacer nada con la disidencia".
Al conversatorio de este viernes no asistió ningún representante del Ministerio de Cultura ni de otra institución oficial, tampoco de la Seguridad del Estado, aunque fueron invitados formalmente y son a quienes Bruguera señala como los principales responsables de la transmisión del material audiovisual que distorsiona los hechos. El encuentro transcurrió con normalidad y no era visible ningún operativo policial en los alrededores de la casa. Aunque la artista reportó que previo al comienzo del conversatorio fueron a vistarla dos oficiales de la Seguridad del Estado para advertirle que "aquello no podría terminar en la calle".
Una joven universitaria que participó en el encuentro y con anterioridad había estado en una sesión donde se proyectó el video difamatorio, aseguró que quedó "impactada" al ver todas aquellas acusaciones sobre Tania pero "donde ella no estaba presente para poder dar su visión o defenderse".
Bruguera, que en estos momentos se encuentra imposibilitada de salir de Cuba, pues está siendo procesada legalmente por los sucesos derivados de su intento de organizar una performance, denuncia vivir en "una guerra psicológica constante". Esta semana ha sido informada por la Seguridad del Estado de que se pidió otra prórroga por 30 días para bajar la medida del fiscal.