Criptomonedas, la regulación pendiente en España
A finales del pasado mes de marzo, Paypal, el principal monedero electrónico a nivel mundial oficializaba la puesta en marcha de su servicio de pago con criptodivisas para sus clientes en Estados Unidos. Una medida que será implementada en el resto de países. Hasta ahora, las funciones de Paypal se limitaban a la simple custodia, pero ahora, los usuarios norteamericanos ya podrán realizar pagos con estas divisas digitales.
2020 será recordado no sólo por ser el año de la pandemia, sino también porque supuso la explosión y generalización de las criptodivisas para toda una nueva generación de inversores y usuarios. En España se calcula que ya hay un millón de personas que realizan operaciones con criptomonedas y, prueba de esto, es que cada vez hay más fintecs que ofrecen ahorro con criptoactivos o el aumento de la búsqueda de casinos con bitcoin en España en portales especializados.
España es junto a Turquía y Rumanía los tres países en el continente europeo con más usuarios operando con criptodivisas. Es posible que esta circunstancia tenga que ver con la inflación de las monedas turca y rumana y con el mercado laboral español que, con casi un 40% de paro juvenil, hace que muchos nuevos inversores que no vienen de la bolsa tradicional, comiencen a ahorrar e invertir en criptoactivos.
Desde hace varios años, tanto la Hacienda Pública Española como SEPBLAC, la Comisión de Prevención de Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias han tratado de establecer una normativa regulatoria en materia de criptomonedas, sin embargo, el tema parece estar pospuesto esperando a una futura normativa marco de la Unión Europea.
Actualmente, la custodia y venta de las criptomonedas en España está equiparada a las acciones de bolsa, algo que no contenta a los usuarios. La mayoría de los inversores en criptomonedas entienden que haya que pagar por convertir Bitcoin a euros, sin embargo, tener que pagar por las permutas, como se hace con las acciones, es un problema tanto para usuarios como para Hacienda.
Las decenas de miles de mini operaciones con céntimos, intereses, airdrops etc. que un usuario de finanzas descentralizadas puede hacer a lo largo del año supone un galimatías para el usuario y un motivo de atasco para la Administración. Otro motivo de queja es la constante amenaza de incluir los criptoactivos en el polémico modelo 720, cuyas multas están impugnadas en la Unión Europea a la espera de sentencia.
Se supone que conforme aumente la adopción de las criptomonedas también tendrá que llegar una regulación que ponga las reglas del juego sobre el tablero. Mientras España no se decide y la Unión Europea posterga la regulación hasta la creación del futuro Euro Digital, gigantes como Paypal ya permiten poder comprar con criptomonedas como Bitcoin, Litecoin, Ethereum o Bitcoin Cash.