Google acelerará, pero no expandirá el acceso a internet en Cuba
La Habana/La noticia ha llenado titulares y generado una ola de entusiasmo. El acuerdo firmado este lunes entre el gigante de la informática Google y la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (Etecsa) mejorará la experiencia de los internautas cubanos, pero no impactará a corto plazo en el número de personas que acceden a la gran telaraña mundial desde la Isla.
El gigante de internet ha dado un paso histórico al vencer la suspicacia oficial en el sector de las telecomunicaciones. Google instalará servidores en territorio cubano que permitirán aumentar la velocidad y la calidad de conexión a la web, una mejoría que agilizará el acceso a servicios como Gmail, YouTube y Google Drive.
Sin embargo, acelerar no significa en este caso expandir. El convenio firmado por la presidenta ejecutiva del monopolio estatal, Mayra Arevich, y el presidente ejecutivo de Google, Eric Schmidt, solo beneficiará a quienes ya se están conectando a la red desde la Isla.
Cuba se halla a la cabeza de los países que muestran menos penetración a internet en el hemisferio occidental. Una hora de navegación desde una zona wifi cuesta el salario de dos días de un profesional y no está exenta de cuelgues, fallas del servicio, el robo de saldo por parte de piratas informáticos y el peligro de los ladrones de teléfonos, laptops o tabletas.
"Este acuerdo permite a Etecsa utilizar nuestra tecnología para reducir la latencia al entregar localmente algunos de nuestros contenidos más populares y de mayor ancho de banda, como los vídeos de YouTube", explicó Google en un comunicado.
El acuerdo no influye en el ancho de banda con que contarán los clientes, ni permite el acceso a los sitios que el Gobierno mantiene bajo una estricta censura
Una vez almacenados en servidores en territorio nacional, esos contenidos llegarán hasta 10 veces más rápido a los internautas, según predicen los especialistas. Pero el acuerdo no influye en el ancho de banda con que contarán los clientes, ni permite el acceso a los sitios que el Gobierno de Raúl Castro mantiene bajo una estricta censura.
Google ha estado explorando de cerca la Isla desde que en 2014 Schmidt visitó Cuba junto a otros directivos, y se entrevistó con periodistas de 14ymedio, estudiantes de la Universidad de Ciencias Informáticas de La Habana y funcionarios. Poco tiempo después del viaje, la empresa abrió para los usuarios cubanos productos como Google Chrome, Google Play y Google Analytics.
La noticia del acuerdo con la compañía estadounidense corría este lunes de boca en boca entre los cubanos y era mostrada en los medios oficiales como un logro alcanzado por el Gobierno para "mejorar la informatización de la sociedad cubana", pero pocos manejaban los detalles pactados.
"Espero que ahora está más cerca la posibilidad de navegar en internet desde los móviles", vaticinaba Yosvel Camejo, cliente de la única telefónica permitida en el país y para quien Google es el único que puede sacar el país "del subdesarrollo".
La firma del convenio se ha producido a pocas semanas de que asuma la presidencia de Estados Unidos el republicano Donald Trump, que jurará el cargo el próximo 20 de enero y ha sido contradictorio en su postura sobre el proceso de normalización de relaciones con la Isla impulsado por su antecesor, Barack Obama. Google se ha apresurado a rubricar el acuerdo, ante la incertidumbre que despierta la llegada del magnate a la Casa Blanca.
Mejorar la experiencia de navegación es un paso que puede ser muy importante para el desarrollo del sector independiente que produce audiovisuales
Para el Gobierno de La Habana también el reloj está marcando ciertas urgencias en las telecomunicaciones. En febrero de 2011 tocó tierra cubana por la playa de Siboney, en el oriente del país, el cable de fibra óptica que conecta la Isla con Venezuela. A través de ese tendido circula la mayor parte del flujo de datos en entrada o en salida.
El acceso desde las casas solo está permitido para un grupo muy reducido de funcionarios, profesionales vinculados al oficialismo y extranjeros residentes en el país. "Lo ideal sería que este convenio lleve también internet a las casas cubanas, para que el país pueda desarrollar todo ese talento que tiene la gente", opina Camejo.
Por el momento, la empresa, con sede en California, ha apostado por mejorar la experiencia de navegación, un paso que puede ser muy importante para el desarrollo del sector independiente que produce audiovisuales y para los youtubers que han comenzado a aflorar en el país.
Organizaciones independientes como la Unión patriótica de Cuba (Unpacu) utilizan con frecuencia los servicios de videos para publicar denuncias, entrevistas e imágenes de la represión en el oriente del país. Con el nuevo acuerdo, su presencia y efectividad en la web puede crecer significativamente.