Las prisas provocan una apertura a media máquina del Parque Tecnológico Hola Ola
La Habana/La esperada instalación de una área de conexión a internet en el Malecón de La Habana ha dado su primer paso. La apertura del Parque Tecnológico Hola Ola el pasado fin de semana fue acogida con gran entusiasmo por los medios de comunicación del Estado que calificaron a la infraestructura de "arquitectura de alta tecnología".
El centro, gestionado por los Joven Club de Computación y Electrónica (JCCE), cuenta con dos salas, una de ellas con 15 computadoras y televisiores de 32 pulgadas para juegos con PC y otra con 15 máquinas más y juegos electrónicos, entre ellos varios simuladores, según anunció la directora provincial de la red de Joven Club en la capital Brígida Baeza Bravo. En la práctica, basta una visita al centro para constatar que hay en torno a una veintena de computadoras que carecen de acceso a la red.
Este martes, los equipos simuladores de vuelo, de conducción y tiro, que fueron instalados por el Ministerio de las Fuerzas Armadas, presentaron problemas con el 'software'
El Parque Tecnológico da muestras de haber sido inaugurado a la carrera y ya son visibles sus primeras roturas. Este martes, los equipos simuladores de vuelo, de conducción y tiro, que fueron instalados por el Ministerio de las Fuerzas Armadas (Minfar), presentaron problemas con el software y tuvo que cancelarse su uso a la espera de las reparaciones pertinentes.
Las vacaciones escolares de fin de año han estimulado la curiosidad de los habaneros que se acercan a Hola Ola con sus hijos para entretener mejor su tiempo. Una empleada trataba de insuflarles esperanza este martes ante el contratiempo que suponía la avería. "Pronto van a reparar las máquinas, pero lo va a hacer la FAR", aclaraba.
La explicación no pareció mejorar el ánimo de los frustrados visitantes que reclamaban su tiempo frente al timón o la pistola de juguete y, para aliviar la situación, la empleada recordó la existencia de la sala climatizada con videojuegos. La cola comenzó a extenderse en las afueras del recinto, donde el uso de una computadora tiene una tarifa de dos pesos cubanos por hora.
Una madre con dos niños pequeños esperaba su turno en la cafetería. "Esta croqueta no hay quien se la coma, está seca y ni siquiera le echan algo al pan para poder tragar mejor", se quejaba la mujer, que había pagado dos pesos por el producto.
Otro de los servicios anunciados en la prensa oficial por Brígida Baeza es el alquiler de tabletas, cuyo uso debía ser gratuito durante los primeros días hasta la aprobación de una tarifa razonable. La opción, por el momento, aún no está disponible al público.
Pero el mayor atractivo del recinto, para los usuarios del Hola Ola, es la zona wifi de acceso a internet instalada en todo el perímetro. La red, gestionada por la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (Etecsa), tampoco trabaja a toda su capacidad, pues no están operativas las antenas en la parte posterior, donde se ubica la parrillada.
La ausencia de un punto de ventas de tarjetas Nauta para la navegación también limita la experiencia de los internautas, un problema que va a solucionarse "muy pronto", según aseguraron varios empleados
La ausencia de un punto de ventas de tarjetas Nauta para la navegación en la red de redes también limita la experiencia de los internautas, un problema que va a solucionarse "muy pronto", según aseguraron varios empleados consultados por este diario.
"Es la zona wifi que me queda más cerca", comentó a 14ymedio Amarilys, una habanera de 34 años residente en la barriada de Cayo Hueso, aunque se queja de que "todavía el precio de conexión es muy alto" a pesar de que recientemente Etecsa rebajó de 2 a 1,50 CUC la hora de navegación.
Los problemas de infraestructura del Hola Ola también llegan hasta los servicios sanitarios, inundados este martes por un salidero de agua. No obstante, las ansias de muchos ciudadanos de conectarse a la red son grandes y los internautas no permitieron que ninguno de estos inconvenientes les aguaran la fiesta de kilobytes.
Cuba es uno de los países con menos conectividad a internet del mundo. En la Isla se han habilitado en los últimos años unos 1.100 puntos de conexión a internet entre salas de navegación y zonas wifi, pero muchos sitios críticos con el Gobierno se mantienen censurados, la velocidad de conexión es baja y el servicio sufre de frecuentes cortes.