En Artemisa, los cubanos se movilizan contra la "corriente de quita y pon"
También devuelven la luz en Sancti Spíritus después de un cacerolazo
La Habana/Si algo han aprendido los cubanos desde que el Gobierno comenzó a aplicar los cortes programados de energía eléctrica, es que si protestan, vuelve la luz. Así fue la noche de este miércoles, cuando hicieron sonar de nuevo sus cacerolas vecinos de San Antonio de los Baños y Güira de Melena, ambas en Artemisa.
En San Antonio, vecinos del lugar hicieron llegar a este diario un video en el que se aprecia el ruido de los utensilios, en mitad de la oscuridad, y los gritos habituales de "pongan la corriente". El cacerolazo duró una media hora, hasta que pusieron la luz, cerca de las nueve de la noche.
"La electricidad debió haber vuelto a las ocho de la noche, pero eran las ocho y veinte y todavía no la habían puesto. La pusieron por la protesta", asevera un vecino en esta ciudad artemiseña, que el 11 de julio de 2021 fue la primera en echarse a las calles.
"En la zona de Hospital dieron candela, y entonces no quieren quitarla de ahí", explica el hombre, refiriéndose a la manifestación de la noche anterior, cuando vecinos de ese y otros barrios salieron a las calles. "Pero las horas que le corresponden a ese reparto nos las quieren poner a nosotros, y no es justo", lamenta indignado.
En la vecina Güira de Melena, una residente confirmó a 14ymedio una manifestación similar la noche de este miércoles en el centro de la ciudad, la cuarta en menos de una semana. "Hoy se ha extremado con la luz; la pusieron a las ocho y media después de cinco horas, y hasta este momento la han quitado cuatro veces", lamentó esta fuente, que ironiza llamándola "corriente de quita y pon".
A esos lugares, que acumulan varios días de protestas, se sumó este miércoles Sancti Spíritus, una ciudad hasta ahora conformista, a pesar de ser de las más castigadas por los apagones, entre otras cosas por ser de las primeras donde se decretaron estas medidas.
Un colaborador de este diario oyó la conversación del policía que cuidaba, la noche de este miércoles, la casa de visita de Sancti Spíritus destinada a los cuadros del Partido Comunista. El agente decía a su interlocutor que había habido un cacerolazo y que le estaban enviando las fotos de algunas personas "que habían detectado" en la manifestación.
De esta conversación se infería que la Seguridad del Estado había sido alertada de que habría una protesta frente a ese edificio oficial y que, gracias al cacerolazo, pusieron la luz de inmediato, antes de la hora prevista.
El agente decía a su interlocutor que había habido un cacerolazo y que le estaban enviando las fotos de algunas personas "que habían detectado" en la manifestación
Estas demostraciones se unen a las ya numerosas ocurridas en días pasados en varios lugares de la Isla, como Santa Clara, Bejucal, Holguín, Cienfuegos, Santiago de Cuba o Pinar del Río.
Como consecuencia de ellas, según Justicia 11J, han detenido a un total de 57 personas, 33 de ellas aún en custodia policial. La plataforma jurídica, creada para dar seguimiento a los cientos de procesados tras las manifestaciones de julio del año pasado, ha registrado cerca de 60 protestas en la Isla por los cortes eléctricos desde el 14 de junio.
Para este miércoles, además, se conminó "a todos los ciudadanos cansados de ser pisoteados" en Holguín a manifestarse contra "este régimen abusivo". "Cuando las autoridades aparezcan e intenten detenernos, unámonos más que nunca; nadie cae durante la marcha, nadie monta en una patrulla, nadie abandona a nadie", dice un texto anónimo difundido a través de canales privados de mensajería. No se sabe, hasta el momento, si la convocatoria tuvo éxito.
Como sea, los habitantes de la Isla están hartos de esta situación y se indignan con las soluciones disparatadas que proponen las webs oficiales. La Unión Eléctrica de La Habana pidió, a través de sus canales de información por mensajería instantánea, que se ahorre en todos los "bloques" en los que se divide la programación de apagones. "El resto de los clientes de los otros bloques sería en este momento muy útil que ahorremos y disminuirá el tiempo de afectación de los clientes del bloque 4", escribieron literalmente vía Telegram.
Frente a ello, los cubanos agudizan el ingenio. Una residente de Luyanó, por ejemplo, contó a este diario que cuando se va la luz en su "bloque", una vecina del edificio adyacente, que ya pertenece a otra demarcación, "me tira una extensión cuando ella tiene luz para que pueda conectar un ventilador". Cuando ella es la que tiene corriente, hace lo propio con la vecina del edificio de al lado. "Solidaridad entre los bloques", bromea la mujer.
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