Crecen los atracos en el mercado negro de cambio de divisas en Cuba
La Policía reporta múltiples casos de robo, sobreprecios, corrupción, estafas electrónicas y distribución ilícita
La Habana/Decidido a destapar el hormiguero del comercio ilegal, al Gobierno cubano no le alcanzan las páginas de los periódicos oficiales para ventilar los casos de corrupción, sobreprecios, robos, distribución ilícita, estafas electrónicas y, últimamente, atracos en las operaciones de cambio de divisas en el mercado negro. Los tímidos reportes diarios del Ministerio del Interior no permiten medir la totalidad del problema, pero dicen mucho sobre la gravedad de la situación.
Un informe publicado este martes en el diario Tribuna de La Habana dio a conocer los resultados de un operativo policial en el municipio de Cotorro. Los agentes detuvieron a un grupo de cubanos que almacenaba "elevadas cantidades de productos alimenticios, de aseo y uso" en dos guaguas Girón, con matrícula de Matanzas, pertenecientes a las cooperativas estatales Flor de Cuba y José M. Duarte.
La red, que operaba a nivel interprovincial, había acumulado un inventario que el periódico se dio el gusto de detallar: casi 800 kilogramos de pollo, 446 paquetes de salchichas, 291 litros de aceite, 660 latas de cerveza y 83 de Red Bull, 150 tubos de picadillos, además de pequeños cargamentos de chocolate, trigo, caldo concentrado, mantequilla y jabones.
La cacería de "corruptos" acaba siempre ubicando a los establecimientos del Estado como principales proveedores de las redes de reventa
El Ministerio del Interior aseguró que los productos serán repartidos en centros de la Seguridad Social y en la red comercial del Estado, que recibirá los dividendos resultantes de su venta.
Otro operativo cayó sobre un "almacén" en San Miguel del Padrón, que la Policía localizó tras una delación y del cual extrajeron 128 cajas que contenían 1.920 litros de aceite. El diario atribuyó el éxito de la operación a los "grupos municipales de enfrentamiento a las ilegalidades" en el consejo popular de Luyanó Moderno.
La cacería de "corruptos" acaba siempre ubicando a los establecimientos del Estado como principales proveedores de las redes de reventa. En la conocida tienda Ultra, en Centro Habana, se decomisaron 190 tubos de picadillo que le costaron una sanción al gerente, al jefe de piso y al responsable del almacén.
Por otra parte, en el mercado agropecuario La Palma, en Arroyo Naranjo, se descubrió un faltante de 371.300 pesos en las ventas, tras la manipulación de los precios de los productos, por lo cual los inspectores decidieron multar a los responsables.
Otro caso de falseo de precios se dio en la tienda Artex del municipio de Boyeros, de la cual dio cuenta una breve nota en Tribuna de La Habana, acompañada por abundantes fotografías del operativo. Los culpables, señala el Ministerio del Interior, fueron tanto los dependientes como los administradores.
Este miércoles, la Policía describía en Granma una nueva modalidad de estafa. Los uniformados, dijeron, se enfrentan sobre todo a "casos de robo con empleo de violencia", pero en los últimos tiempos han ocurrido "hechos lamentables" a través de las comunicaciones digitales.
"Se confirma la utilización de las redes sociales para proponer la venta o compra ilícita de divisas, en su mayoría a menor precio que el fijado para su comercialización", señalaron en su descripción del anzuelo usado por los delincuentes para atraer a sus potenciales víctimas.
Nombres falsos, varias líneas de teléfonos y números extranjeros son, en opinión de la Policía, las herramientas de los estafadores
"El interés de los autores es sustraer elevadas sumas de dinero, y para ello se ponen de acuerdo con sus víctimas con el fin de realizar el canje, generalmente en edificios altos, lugares apartados o viviendas con varias entradas y salidas, suceso que termina en un robo mediante el ardid o engaño, la intimidación de las personas, la fuerza física, el empleo de armas blancas u otros objetos", conjeturaron los agentes.
Nombres falsos, varias líneas de teléfonos y números extranjeros son, en opinión de la Policía, las herramientas de los estafadores, a quienes atribuyen "buena apariencia física y características empáticas".
El Ministerio del Interior no ofreció más detalles sobre sus operaciones contra la compraventa digital, pero advirtió que ya había arrestado a varios delincuentes, a los cuales "se les ha aplicado el debido proceso". Según la nota, la Policía no recibe demasiadas denuncias de las víctimas, que temen quedar envueltas también en el delito. Por ello, los oficiales alientan a los estafados a "acudir a las estaciones" para presentar una denuncia.
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