Ferrer anuncia el fin del cerco policial y evalúa suspender la huelga de hambre

La Habana/Después de 26 días, el cerco policial alrededor de la sede de la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu), en Santiago de Cuba, fue levantado este viernes.

Lo confirmó el propio líder de la organización, José Daniel Ferrer, en una transmisión directa con Rosa María Payá. El opositor, que lleva tres semanas en huelga de hambre, apareció tumbado en una cama y visiblemente cansado. Según explicó, la doctora le puso suero después de que, dos horas antes, su presión arterial bajara "considerablemente".

Ferrer lo había adelantado en un tuit publicado en la mañana, en el que informó de que según "varias fuentes consultadas", quienes fueron a poner fin al cerco de 26 días contra la Unpacu fueron dos generales del Ministerio del Interior y la gobernadora de la provincia, Beatriz Johnson. En ese momento, pidió actuar "con cautela", pero confirmó el hecho tras comprobar, a través de varios activistas, que no había "represores" en las inmediaciones del lugar, que es también la vivienda familiar del activista.

"Si esto es un levantamiento definitivo y no temporal, la huelga será suspendida", aseveró Ferrer, quien sí afirmó que pedirá el fin de la huelga a los activistas que se encuentran delicados de salud y agradeció la solidaridad dentro y fuera de Cuba que ha despertado la protesta.

"Podríamos hablar de una victoria de la razón, del humanismo que nos caracteriza contra la perversidad de un régimen que odia a su pueblo"

"Podríamos hablar de una victoria de la razón, del humanismo que nos caracteriza contra la perversidad de un régimen que odia a su pueblo", dijo el opositor.

Ferrer también había observado una disminución del operativo policial alrededor de su vivienda ante la visita del arzobispo de Santiago de Cuba, Dionisio García, este jueves. "Pero resulta que se habían escondido porque venía el arzobispo Dionisio García a interesarse por nuestra salud", escribió.

La visita del religioso a la sede de Unpacu se realizó después de un creciente reclamo para que la Iglesia católica intercediera por los huelguistas para preservar sus vidas, una demanda que en los últimos días ha sido apoyada por otros opositores y desde el exilio cubano.

La huelga de hambre exigía el fin del cerco represivo contra la sede de la Unpacu en Santiago de Cuba y ha recibido el apoyo de numerosas organizaciones internacionales y políticos. El Parlamento Europeo instó al Gobierno cubano a parar de forma inmediata la represión y las detenciones arbitrarias contra los miembros de la Unpacu.

Desde hacía casi un mes, la Seguridad del Estado y la policía impedían que activistas de la organización opositora entregaran alimentos y medicinas a las familias necesitadas en el reparto Altamira. En solidaridad con los huelguistas, se sumaron al ayuno decenas de personas dentro y fuera de la Isla.

El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, durante una conferencia de prensa virtual organizada por Cuba Decide a finales de marzo, acusó al régimen de Cuba de aplicar el "terrorismo de Estado a quienes piensan distinto" y le hizo responsable de "la salud y el bienestar" de los activistas de derechos humanos en huelga de hambre.

"Es hora de que la democracia retorne a Cuba", dijo Almagro, quien resaltó que ya son "varias generaciones de cubanos" que no tienen derechos ni libertades debido a un régimen "autoritario".

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