Llegan a Cuba un barco de guerra ruso y un submarino de EE UU

La Habana/Sin que ningún alto cargo cubano recibiera a su tripulación, el buque de guerra ruso Perekop echó anclas la mañana de este martes en el puerto de La Habana. Los policías, que se movían inquietos por el muelle y bloqueaban con sus patrullas el acceso a la nave, impidieron que los cubanos se acercaran al mastodóntico casco del barco, como constató este diario.

A esa misma hora, la Cancillería cubana emitía un comunicado oficial sobre el paso por la base naval estadounidense de Guantánamo, del 5 al 8 de julio, de un submarino de propulsión nuclear como parte de la "escalada provocadora" de EE UU.

"La presencia allí de un submarino nuclear en estos momentos obliga a cuestionar cuál es la razón militar del hecho en esta región pacífica del mundo, contra qué objetivo se dirige y qué propósito estratégico persigue", argumentaba el texto que, no obstante, se abstuvo de aludir a la llegada, días después, de un barco militar con capacidad para 500 soldados de la marina rusa que arriba a la Isla en el segundo aniversario de las multitudinarias protestas del 11 de julio de 2021.

Horas después Estados Unidos respondió a Cuba que tiene derecho a desplazar activos a su base militar de Guantánamo.

"Como ya dijo el Pentágono, seguiremos volando, navegando y trasladando activos militares donde nos lo permita el derecho internacional", señaló al respecto el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, en una rueda de prensa este martes.

Mientras tanto, la prensa oficial de la Isla, que publicó en primera plana el mensaje de la Cancillería, ha sido escueta al reportar el arribo del Perekop, Según Cubadebate, la tripulación fue recibida por el capitán cubano José Luis Souto y el embajador ruso en Cuba, Víctor Koronelli.

A la sencilla ceremonia –rematada por el disparo de varias salvas desde la fortaleza de La Cabaña– no asistieron Miguel Díaz-Canel, el primer ministro Manuel Marrero ni algún alto cargo de las Fuerzas Armadas, cuyo titular, Álvaro López Miera, visitó hace poco Moscú. En su "amplio programa" de actividades estará una visita de cortesía al jefe de la Marina de Guerra Cubana y a la gobernadora de La Habana.

Los cubanos que deseen visitar la cubierta del Perekop podrán hacerlo este miércoles, de las 10:00 a las 18:00 horas, y el jueves, de las 10:00 a las 16:00.

El Perekop –cuya visita fue anunciada por Marrero el pasado junio– pertenece a la Flota del Báltico y suele viajar con cientos de cadetes de las academias navales de las ciudades de San Petersburgo, Vladivostok y Baltiysk. Se supone que trae a la Isla "una carga humanitaria", según medios oficiales rusos, pero hasta ahora no se ha aclarado en qué consiste la ayuda ni por qué se entrega.

La colaboración militar entre La Habana y Moscú se ha desarrollado en un ambiente de hermetismo. Aunque el generalLópez Miera se ha sumado a la caravana de altos cargos cubanos que han recalado en el Kremlin, poco o nada se conoció de su reunión con Sérguei Shoigu, su homólogo ruso.

Está previsto que la plana mayor del Perekop pase varios días en La Habana como parte de un proceso de intercambio "cultural y empresarial" con la Isla.

Sin embargo, Cuba Siglo 21 alertó este lunes que el arribo de la nave esconde "otros intereses", fruto de un contubernio entre el régimen de Vladímir Putin y el de La Habana. En un dossier firmado por el ex general cubano Rafael del Pino, la organización advierte de que es Rusia y no EE UU quien tiene intenciones de "provocar" una tensión militar en aguas caribeñas.

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