La policía vigila la calle Prado tras las protestas de varias familias por un derrumbe en La Habana
Los muebles también fueron retirados de la vía
La Habana/Un fuerte operativo policial rodeaba este miércoles las inmediaciones del número 352 del Paseo Martí (Prado), esquina Virtudes, justo en el límite entre Centro Habana y La Habana Vieja, donde este martes los vecinos se manifestaron en la calle, luego de un derrumbe parcial que tuvo lugar el lunes.
Ese mismo día, este diario atestiguó que los residentes del lugar habían sacado sus muebles y estaban sentados afuera, hablando con varios agentes de Policía. Un día después, según se observa en videos difundidos en redes sociales, más de una docena de personas han hecho sonar los calderos en la entrada, principalmente madres junto a sus hijos.
En horas de la tarde de este miércoles, agentes uniformados y de civil se encontraban patrullando la zona, atentos al mínimo movimiento. Ningún vecino se prestó a contar detalles de la protesta espontánea, que en cualquier caso fue acallada con celeridad. Los muebles también fueron retirados de la vía.
Lo de Prado fue similar a lo que ocurrió en la calle Empedrado, donde varios balcones interiores se vinieron abajo con las lluvias del domingo, que fueron la excusa esgrimida por el Gobierno para cancelar la celebración del Día de los Trabajadores el 1 de mayo.
Las imágenes difundidas este martes, recuerdan las protestas a finales de septiembre y principios de octubre del año pasado tras el paso del huracán Ian cuando toda Cuba se quedó sin electricidad por varios días. En muchos barrios salieron a sonar los calderos las madres cubanas junto a sus hijos pequeños, incluso, impidieron el tránsito vehicular en varias calles.
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