Además de arrasar el tabaco, el huracán Ian ha dañado la producción de huevos en Cuba

Madrid/Sigue el recuento de daños tras el paso del huracán Ian, que ha acabado de rematar uno de los sectores más sufridos en Cuba, la agricultura. A los ya conocidos efectos sobre la industria tabacalera se unió ayer el balance total : 21.259 hectáreas afectadas.

Los principales cultivos perjudicados, tabaco aparte, son el plátano y la yuca, que suman 8.875 hectáreas afectadas. Ambos productos son muy consumidos en la Isla y, en el caso concreto de la yuca, se estaba extendiendo su uso en la fabricación de harina, ante la escasez de la de trigo, fundamentalmente por los efectos de la guerra de Ucrania.

En el caso de estos dos cultivos, las autoridades han informado de que se está cosechando lo aprovechable para uso humano y dejando el resto para los animales. El plátano se recupera mejor y, de hecho, en Artemisa quedaron dañadas 5.600 hectáreas (el 73% del total), pero se han podido mantener 2.500 dejando los hijos (retoños) de la mata. Sin embargo, lo que no sea viable deberá ser desechado. El caso de la yuca es más complejo, solo se puede preservar la semilla y volver a sembrar.

"Depositamos en nuestros productores gran confianza, pues aunque han tenido pérdidas, tienen carencia de insumos y combustible, tienen la disposición de trabajar en la recuperación de los daños"

Los detalles se conocieron este miércoles en el programa televisivo Mesa Redonda, donde el viceministro de la Agricultura, Maury Hechavarría Bermúdez, llamó una vez más a la voluntad y entrega de los trabajadores y organizaciones de masas. "Depositamos en nuestros productores gran confianza, pues aunque han tenido pérdidas, tienen carencia de insumos y combustible, tienen la disposición de trabajar en la recuperación de los daños", dijo.

No explicó cómo la disposición suplirá los materiales de los que carecen, aunque sí indicó que se ha contactado con la agencias de cooperación para la alimentación de Naciones Unidas (FAO) para adquirir insumos, semillas y techos para las casas de cultivo.

Las provincias más afectadas en la agricultura fueron Pinar del Río, Artemisa, Mayabeque y, algo menos, La Habana, que sufrió más en el arbolado. No obstante, la agricultura urbana también ha sufrido, quedando dañadas 7.471 parcelas y el efecto es grave.

El viceministro indicó que se han recuperado 2.118 parcelas, pero que se trata de cultivos de ciclo corto, entre ellos hortalizas y condimentos, que son "vitales para la población". En este caso se ha previsto recuperar la producción, sobre todo recurriendo a las semillas de hortalizas donadas por institutos de investigación agrícola.

La prioridad es recuperar la col china, lechuga, rábano, acelga, perejil y otros, y las siembras en parcelas de pepino, tomate, lechuga, quimbombó, melón, zanahoria y calabaza, entre otros.

Se habló nuevamente, largo y tendido, de los daños sufridos por el tabaco en Pinar del Río, pero también de algo poco comentado hasta la fecha. La provincia también destaca por ser una de las mayores productoras de huevos, destinados a la canasta, y la producción avícola no se ha librado del embate.

De 330 naves avícolas, 133 tienen daños en el techo y 21 están completamente arrasadas. Además, la falta de luz impidió la alimentación y bebida de las aves. Como consecuencia, 16.000 gallinas ponedoras y 45.000 pollitos recién nacidos murieron. Si los huevos ya estaban perdidos, solo cabe esperar lo peor, por mucho que las restantes aves estén ya cuidadas y se estén recuperando los techos de las naves.

En cuanto a la carne, se sabe que murieron 176 animales de ganadería bovina, aunque se desconoce, en cambio, cuántos fallecimientos hubo de cerdos

En cuanto a la carne, se sabe que murieron 176 animales de ganadería bovina y hay 182 unidades afectadas, además de 259 naves de las que han sido recuperadas 37 hasta ahora. Se desconoce, en cambio, cuántos fallecimientos hubo de cerdos, un producto que ya se consideraba un manjar por su precio y escasez. Sí se indicó que los animales están alimentados y que de las 77 naves dañadas se recuperaron 10.

Los daños de Ian sobre la agricultura amenazan no solo al estómago de los cubanos y a la captación de divisas, en el caso del tabaco, sino que serán perceptibles de nuevo en la macroeconomía. Los últimos datos del Producto Interno Bruto, publicados por la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (Onei), reflejan que el crecimiento económico que tenía la Isla después de la brutal caída que sufrió durante la pandemia se ralentizó en el segundo trimestre.

Si en el cuarto periodo de 2021 y el primero de 2022 la tasa de crecimiento interanual fue de 10,9%, esta vez apenas alcanzó el 1,7%. La agricultura es, de hecho, uno de los sectores que más contribuyen en la negatividad del PIB (-7,4%), y acumula seis trimestres consecutivos de variaciones interanuales negativas, al igual que la industria y los suministros (electricidad,gas,agua).

Las mayores caídas de este segundo trimestre fueron, no obstante, la industria azucarera (-43,8%) y la pesca (-33,2%). Sin embargo, amortiguan sobradamente los hoteles (42,1%) y la educación (39,4%), que junto con la construcción (19,6%) permiten que el PIB aún mantuviera un valor positivo. El tercer y cuarto trimestre, en cambio, previsiblemente cambiarán la tendencia.

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