Los apagones agudizan los múltiples fallos en el suministro de agua en Cuba

La Habana/Con el aumento de los apagones en los últimos días, los problemas de abastecimiento de agua se han agudizado en todo el país y las explicaciones dadas este jueves en el espacio televisivo Mesa Redonda no han contribuido a tranquilizar a los cubanos. El enfoque era claro: la sequía es grave, el fenómeno empeora con el cambio climático y el Gobierno toma medidas para combatirlo en tres frentes. Uno es el medioambiental, con el programa Tarea Vida, otro el de infraestructuras, con un plan de desarrollo hidráulico, y último el policial, para sancionar a los grandes consumidores.

Para ver el resultado de las medidas de protección al medioambiente habrá que esperar decenios y contar con la comunidad internacional, pero el plan de desarrollo hidráulico, después de años de funcionamiento, no parece estar dando demasiados frutos. A día de hoy basta abrir la prensa provincial para toparse con que el Gobierno sigue siendo incapaz de llevar a las viviendas un suministro de agua normalizado.

Los problemas de La Habana son de sobra conocidos. La pasada semana, los vecinos de los repartos de El Canal (Cerro) y La Víbora (Diez de Octubre) supieron que pasaban de tener tener abastecimiento apenas cada dos días a aumentar hasta tres. Las razones esgrimidas, las de siempre: "la intensa sequía", "los niveles freáticos muy deprimidos", "faltas de agua y bajas presiones"...

La avería ha provocado la movilización de más camiones cisterna a las zonas afectadas, por lo que las que se hayan librado verían "alargados sus ciclos de entrega"

Apenas una semana más tarde, este jueves, se produjo una avería eléctrica que dañó la fuente Cuenca Sur, perjudicando a los municipios a los que canaliza el agua: Plaza de la Revolución, Centro Habana, Cerro, Diez de Octubre y La Habana Vieja, además de los repartos Miraflores y Altahabana, en Boyeros. A La Víbora le tocó doble perjuicio: ese era uno de los tres días que le tocaba recibir agua.

El Consejo Provincial advirtió de que la cosa no quedaba ahí. La avería ha provocado la movilización de más camiones cisterna a las zonas afectadas, por lo que las que se hayan librado verían "alargados sus ciclos de entrega".

Podría ser peor, según las autoridades, que dijeron anoche en la Mesa Redonda que las pérdidas en salideros han sido reducidas del 58% de 2011 al 42% actual. "Si no perdiéramos tanta agua, no tendríamos que buscar nuevas fuentes. Hoy tenemos más de 5.000 salideros, de ellos 2.000 están en La Habana", afirmaron. Para resolverlo, están previstos 3.000 millones de pesos en inversiones y 2.000 millones en mantenimiento.

Más allá de la capital, en Sancti Spíritus también se han levantado con las explicaciones pertinentes al "comportamiento irregular" del suministro de agua.

"Los problemas fundamentales que tiene el abasto de agua hoy en la ciudad de Sancti Spíritus se relacionan con averías continuas que hemos tenido en el sistema de abasto a la ciudad, sobre todo en la estación de bombeo conocida por Manaquitas, que es la que tributa el agua hacia la planta potabilizadora de Macaguabo", dijo al diario Escambray Franklin Lantigua, director de la Empresa Provincial de Acueducto.

A partir de ahí desgranó la cantidad de trabajos realizados para resolver las averías en los equipos de bombeo y la supresión de salideros, un discurso anual que suele ir acompañado de frases como esta: "La ciudad espirituana ha ido creciendo y aumentando el consumo doméstico y socioeconómico de agua durante las últimas décadas, a pesar de mantener la misma infraestructura hidráulica desde hace 40 años, realidad que deteriora el servicio en algunas zonas".

A pesar de los grandes planes nacionales, la red de saneamiento entera de la Isla tiene casi medio siglo y los parches no están sirviendo para resolver los problemas constantes que los ciudadanos tienen para abrir un grifo del que salga agua

A pesar de los grandes planes nacionales, la red de saneamiento entera de la Isla tiene casi medio siglo y los parches no están sirviendo para resolver los problemas constantes que los ciudadanos tienen para abrir un grifo del que salga agua. El panorama es aciago en medio de una pandemia y, aunque los científicos han concluido que la transmisión del coronavirus es especialmente elevada por gotículas o aerosoles, el lavado de manos sigue siendo una de las armas imprescindibles para combatir cualquier epidemia.

Este jueves, el diario Venceremosdaba razones, también, de por qué hay menos agua en Guantánamo. El nivel de los embalses ha bajado, pero también hay problemas de presión por las malas infraestructuras y los municipios más elevados sufren. "Una de las alternativas es la instalación de las conexiones faltantes de la conductora Bano Sur, una inversión en proceso de aprobación por el Instituto de Recursos Hidráulicos que, de concretarse, podría mejorar la distribución en las villas María y Esperanza, y los barrios Primero de Mayo y Pastorita", dijo el vicedirector de la Empresa municipal de Acueductos y Alcantarillados.

No hace ni un mes que en Santiago de Cuba, los vecinos se lamentaban de que siguen sin arreglarse roturas en la tubería principal que abastece a varios repartos y de las que habló ya en 2020 el diario oficial Sierra Maestra.

En Villa Clara solo hace falta ir al mes de febrero para ver otro caso de residentes alarmados por la falta del más básico de los servicios que proporciona un Gobierno. "Los representantes de las entidades implicadas explicaron que en estos momentos existen problemas con una bomba del sistema Minerva-Ochoíta, la cual está en proceso de reparación en la fábrica Planta Mecánica. Mientras esta situación persista será complicado cumplir con los ciclos de abasto en algunos consejos populares", indicó entonces el medio localVanguardia.

En medio de todas estas roturas, anoche los intervinientes en la Mesa Redonda no dudaron en buscar al culpable habitual: "el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de Norteamérica". "Ejemplo de ello es el asedio a los proveedores, la exigencia de que los recursos que importemos no tenga más de un 10% de componentes americanos o la imposibilidad de las navieras para trasladar los recursos hasta nuestro país. Materias primas que podemos adquirir en la región hay que buscarlas en Europa o Asia, con un encarecimiento de los costos entre un 30 y un 40% del valor original", señalaron.

A pesar de eso, la prensa oficial destaca las "buenas noticias". En Victoria, se celebró que, con motivo del Día Mundial del Agua, el 22 de marzo, en Isla de la Juventud más del 98% de la población tenía abastecimiento de agua de calidad y accesible para todos.

En Camagüey, el diario local Adelante informó de la finalización inminente de nuevas infraestructuras y lo hizo rememorando un momento en que Luis Palacios Hidalgo, un ingeniero local, pidió la palabra durante una reunión sobre abastecimiento de agua, alzó una botella transparente de agua de la shopping y aseguró que "cuando los habitantes servidos por el acueducto recibieran un líquido similar, los resultados de tantos esfuerzos de muchas generaciones serían reconocidos".

"Y aunque hasta para él aquella propuesta parecía una total utopía, un sueño imposible, hoy la inverosímil sentencia está cada vez más próxima a la realidad", cerraba la anécdota el texto. No parece importar que los hechos a lo largo y ancho de la Isla desmientan el optimismo del medio oficial e, incluso, demuestren todo lo contrario.

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