Al ánimo, al ánimo, la fuente revivió
La Habana/Durante décadas esta fuente se mantuvo seca. Fue construida a finales de los años 80 como un adorno a la entrada del círculo infantil ubicado en la esquina que forman la calle Xifre y la avenida Carlos III, en pleno corazón de Centro Habana. Los niños que inauguraron esta guardería nunca llamaron al local Los martianitos que es su nombre oficial, sino “el círculo de la fuente”.
Las empleadas del lugar dicen que hace unos días vinieron unos trabajadores de la Empresa de Comunales. “Parece que el problema era sencillo porque la arreglaron en un dos por tres”. Interrogadas sobre la fecha exacta en que volvió a funcionar no se pusieron de acuerdo. No estaban seguras si fue “después que dieron la noticia de la muerte de Fidel Castro…” o “un poco antes”.
Ahora, el agua fluye en medio del ajetreo del municipio más poblado de toda Cuba, un trozo de ciudad que algunas consideran la “verdadera Habana”
Ahora, el agua fluye en medio del ajetreo del municipio más poblado de toda Cuba, un trozo de ciudad que algunas consideran la “verdadera Habana” por su dura cotidianidad, sus graves problemas habitacionales y la fuerza que tiene en sus calles el mercado informal. Los vecinos de la cercanía no dejan de encontrar las coincidencias entre el restablecimiento de la fuente y el acicalamiento de la ciudad para las honras fúnebres del expresidente.
Un septuagenario que paseaba con su perro contó a este diario que había trabajado en esa obra cuando estaba en la microbrigada. “Además de construir nuestras casas hicimos muchos círculos infantiles en La Habana. Cada vez que pasaba por aquí y veía esta fuente sin agua me daba mucha tristeza. Vamos a ver cuánto dura…”.
En una ciudad donde la mayoría de las fuentes duermen secas el sueño de la desidia y la falta de mantenimiento, resulta una hermosa noticia ver a este surtidor revivir.
