Las autoridades sanitarias cubanas señalan que el Oropouche afecta nueve provincias
La basura y las aguas estancadas favorecen la proliferación del mosquito culex, que transmite la enfermedad
La Habana/En un comunicado emitido este lunes, el Ministerio de Salud Pública informó de casos de Oropouche en 23 municipios de nueve provincias: Matanzas, Mayabeque, Villa Clara, Sancti Spíritus, Ciego de Ávila, Holguín, Guantánamo, Santiago de Cuba y Cienfuegos. El texto no menciona La Habana, pese a que diversos testimonios recabados por este diario acreditan la presencia de la enfermedad en la capital.
Los contagios se identificaron, dice el comunicado citando al doctor Francisco Durán, director nacional de Epidemiología, luego de realizar muestras en el laboratorio nacional de referencia del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK), en La Habana.
El cuadro clínico que se manifiesta “es leve”, según las autoridades, con un período de incubación de entre cinco y siete días, que se caracteriza por fiebre, dolores de cabeza, musculares y articulares; en ocasiones, también se reportan vómitos y diarreas.
“Asociados al virus en un grupo de pacientes” se observa que “sobre el sexto día aparece un cuadro similar al inicial, que no deja secuelas y no se asocia a la aparición de formas graves ni fallecidos”, insiste el ministerio. El pasado 8 de junio, el periodista independiente residente en Estados Unidos Yosmany Mayeta reportó en Facebook el fallecimiento de un joven que habría pasado tres días internado en un hospital santiaguero con síntomas de Oropouche, aunque sin especificar si tenía padecimientos previos ni la causa verificada de la muerte.
El cuadro clínico que se manifiesta “es leve”, según las autoridades, con un período de incubación de entre cinco y siete días
Con la expansión del virus, el Gobierno llama a la población a que coopere y pide acudir “de inmediato al sistema de salud ante la aparición de síntomas”, así como “apoyar y realizar iniciativas propias de saneamiento en viviendas, centros laborales y sus alrededores”.
Las condiciones para detener el brote de Oropouche en la Isla no son las idóneas. Con las calles llenas de basura debido a que no se recoge en días, más las aguas estancadas por las lluvias y el deficiente sistema de alcantarillado, el insecto que transmite la enfermedad, el mosquito culex, tiene el ambiente ideal para su reproducción.
“Sin barridos de calles y manzanas, todos caeremos víctimas de este fenómeno", dice Arnoldo Fernández, de Contramaestre, Santiago de Cuba, quien padece el virus. El escritor creía poder librarse por usar "pantalones, camisas a mangas largas y medias", pero finalmente sucumbió. "Intenso dolor de cabeza, fiebres de más de 38 grados, ardor en los ojos y pérdida del apetito", enumeró los síntomas.
Desde Matanzas, la activista Annia Zamora alerta de un aumento en el número de casos en la provincia. “Son muchos los enfermos y sin medicamentos. Vivo en un pequeño pueblo donde ni ambulancia hay y los enfermos aumentan y las autoridades no hacen nada. Entre el virus y el hambre no sé qué pasará”, lamenta.
El insecto que transmite la enfermedad, el mosquito culex, tiene el ambiente ideal para su reproducción
Sin dar cifras de casos en su reporte, el ministerio informó que ha activado los sistemas sanitarios en la Isla, en un contexto de “desafiantes complejidades”, debido también a que, en las últimas semanas, se reporta un incremento de la tasa de incidencia de casos sospechosos de dengue, en particular en el municipio especial de Isla de la Juventud y en las provincias de Santiago de Cuba, Guantánamo, Ciego de Ávila, Camagüey, Holguín y Cienfuegos.
“A diferencia del Oropouche, el cuadro clínico de esta enfermedad puede evolucionar a formas graves y causar la muerte, por lo que se insiste en la necesidad de acudir al médico oportunamente”, alerta también el comunicado oficial.