Los balseros del Faro vuelan a Australia
Miami/Los 17 balseros cubanos que permanecían en la Base Naval de Guantánamo han viajado el viernes a Australia en calidad de refugiados. Los migrantes serán ubicados en la ciudad de Brisbane, estado de Queensland, según comunicaron fuentes familiares a 14ymedio.
“Todos vamos a ser reasentados en Australia. Estamos muy felices porque tenemos una oportunidad para recomenzar nuestras vidas y trabajar duro”, explicó uno de los refugiados, Alexander Vergara, vía telefónica desde el aeropuerto de Dubai, donde estaba en tránsito.
Hace algo más de un año, 24 balseros se refugiaron en el faro American Shoal Light, cerca de los cayos de la Florida para evitar ser capturados por la Guardia Costera y regresados a Cuba.
El Movimiento Democracia, dirigido por Ramón Saúl Sánchez, organizó la defensa de los migrantes, solicitando que no fueran devueltos a la Isla y que se acogieran a la entonces política pies secos/pies mojados, que daba refugio a los cubanos que pisaran territorio estadounidense.
De los 24 balseros, cuatro fueron regresados a Cuba y otros 20 trasladados a la Base Naval de Guantánamo tras probar que temían regresar a la Isla. Posteriormente, uno de los refugiados en la Base fue regresado a Cuba por haber trabajado para el Ministerio del Interior en el pasado y otros dos pidieron ser devueltos a su lugar de origen.
Tras una ardua batalla judicial el juez dictaminó que el faro donde se refugiaron no podía considerarse territorio norteamericano, pero la defensa apeló. El caso aún está pendiente en los tribunales y, si el equipo de abogados -que realiza el trabajo pro bono- gana el pleito, Estados Unidos les concederá visados para que regresen.
“El Movimiento Democracia, así como el grupo de balseros y sus familiares tanto en Cuba como en los Estados Unidos, desean expresar su más profunda gratitud al grupo de abogados”, dijo esa organización en un comunicado y agregó que extienden sus agradecimientos a los Gobiernos de ambas naciones y al fiscal Dexter Lee, quien se había comprometido a no repatriar a los balseros.
Según la ahora derogada política de pies secos/pies mojados, se devolvía a Cuba a los balseros interceptados antes de tocar tierra norteamericana. No obstante, en caso de demostrar un temor creíble a ser perseguido en la Isla, el migrante podía ser trasladado a la Base Naval de Guantánamo y Estados Unidos se comprometía a reubicarlo en un tercer país.