Dos médicos cubanos llevan un año sin que el banco les entregue los dólares que ganaron en Angola
"Sin posibilidad para comprar una vivienda", los sanitarios creen que el Estado no les retribuye su sacrificio
Madrid/Como si no bastara con retener más del 70% del salario de los médicos en “misiones” internacionales, los bancos cubanos han negado la extracción de divisas durante más de un año a dos sanitarios que trabajaron en Angola. La información fue publicada esta semana por la propia prensa oficialista, a la que la pareja acudió en un último intento por obtener lo que les corresponde.
Acuse de recibo, una sección del diario Juventud Rebelde dedicada a publicar las quejas de la población, fue la receptora de la reclamación de Eliannys Saborit Oliva y Alfredo Miguel Ramos, una pareja formada por una anestesióloga y un ortopédico que reside en el municipio de Bayamo, en Granma.
Tras su regreso de Angola en 2023, donde pasaron tres años como parte de uno de los contingentes sanitarios que Cuba exporta a multitud de países, los médicos ingresaron a la Isla una cantidad no revelada de divisas que debió ser devuelta “en un tiempo razonable” a sus dueños. No obstante, el Banco Popular de Ahorro de Bayamo no ha sido capaz de entregar, desde octubre de ese año, el pago a los médicos, alegando baja disponibilidad de divisas.
El Banco Popular de Ahorro de Bayamo no ha sido capaz de entregar, desde octubre de ese año, el pago a los médicos, alegando baja disponibilidad de divisas
Saborit y Ramos, que aseguran que quieren el dinero para poder independizarse, se han quedado sin opciones, pues al ser residentes en Granma solo pueden cobrar las divisas en esa provincia. Mientras, sus colegas de otros territorios hace tiempo que recibieron sus salarios.
“Tampoco trazan estrategias de envío de refuerzo monetario, tras casi un año de espera, para extraer el efectivo en divisas que nos corresponde por haber ingresado dinero al país, representando además dignamente a nuestra nación, salvando vidas quirúrgicamente, en condiciones adversas de tuberculosis, hepatitis, VIH, paludismo, Covid-19, con el sacrificio de abandonar hija y al resto de la familia”, asegura la pareja, que no ve sus esfuerzos retribuidos.
“Hemos realizado tres viajes a La Habana, con cartas efectuadas a nivel de Consejo de Ministros desde donde se transfirió el asunto al Banco Central de Cuba, que alega la misma respuesta: no hay disponibilidad”, lamentan los sanitarios, que explican que continúan “sin el dinero demandado, luego de varias quejas tramitadas a nivel central bancario, sin fecha además para entrega y sin posibilidad para comprar una vivienda”.
“Es real la baja disponibilidad, pero no es por nosotros entendible que en un periodo de casi un año no tengamos resuelta la demanda”, concluye la pareja en su crítica solapada al sistema bancario cubano.
Los sanitarios están obligados a depositar en los bancos de la Isla las divisas obtenidas durante sus misiones en otros países, una política implementada para tratar de evitar la deserción
Los sanitarios están obligados a depositar en los bancos de la Isla las divisas obtenidas durante sus misiones en otros países, una política implementada para tratar de evitar la deserción de estos profesionales. Si llegan a abandonar la misión, los sanitarios pierden sus salarios, que pasan a las arcas del Estado.
Este aspecto de las misiones médicas, así como la retención por parte del Estado de entre el 70% y el 95% de los montos que pagan otros países por cada sanitario cubano, ha sido señalado por varias organizaciones como un modelo de esclavitud moderna.
Algunos de los sanitarios incluso han roto el silencio y se han quejado de que la parte del dinero que Cuba les deja para vivir mientras están de misión apenas alcanza para las necesidades básicas. En 2023, uno de los médicos de los más de 600 enviados ese año a México contó al diario Reforma que, más que un salario, él y sus colegas recibían un “estipendio”. Su sueldo, añadió, menos el porcentaje con el que se queda el régimen, estaba en Cuba.
Por su parte, pese a tener un sistema sanitario devastado –donde faltan desde los insumos y los medicamentos hasta los propios profesionales–, Cuba insiste en que parte del dinero que pagan otros países por los médicos cubanos se reinvierte en la Salud Pública de la Isla.
“Acabar con estos ingresos significa impedir a Cuba la compra o fabricación de medicamentos, la reparación de hospitales, la importación de tecnología médica o, sencillamente, la mejora económica del personal cooperante y sus familias”, alegaba el pasado febrero el portal procastrista radicado en España Cubainformación. Lo cierto es que, tal y como el propio Gobierno de Cuba informa, más del 33% del presupuesto del Estado va a parar a las inversiones del turismo. Esto se refleja en las cuentas públicas de 2023, donde figura que Salud recibe menos del 2% del presupuesto.