Los cementerios de Artemisa no tienen espacio ni carros fúnebres

La Habana/Hasta morir en Cuba es un problema. Los cementerios de Artemisa no tienen espacio para sepultar a más muertos, confirmó este jueves a El Artemiseño la directora provincial de los Servicios Comunales, Leticia Romero Cisnero. La funcionaria aseguró que tampoco hay vehículos disponibles para trasladar los restos mortales, por lo que las familias deben buscar alternativas privadas o esperar horas interminables hasta que llegue el carro fúnebre.

El diario retoma la "amarga experiencia" de la artemiseña Beatriz Márquez, quien hace un año se enfrentó a una odisea para darle el último adiós a su abuela, no solo por la habitual demora del transporte, sino por la falta de "gavetas" disponibles para el enterramiento.

En la funeraria entregó el certificado de defunción para que el carro fúnebre fuera a recoger los restos. "Lo vi salir", asegura, pero no llegó. Cuando preguntó en la oficina, le dijeron que primero tenía programado un viaje a Caimito y después a Bauta. "Estuve cuatro horas con mi abuela en casa", recuerda, a lo cual se añadió la falta de "opciones" para darle sepultura, según informaron las autoridades.

El Artemiseño reconoce que relatos como el de Márquez son cada vez más frecuentes por el "déficit" de espacios. La directora de los Servicios Comunales explicó que la saturación en los camposantos se debe al acelerado envejecimiento de la población cubana y también al aumento de la mortalidad durante la pandemia de covid-19.

Romero aseguró que en 2021 se construyeron nuevos nichos para "aliviar" el problema, pero no fueron suficientes. Los espacios de Comunales son alquilados por dos años y, después de ese período, se debe realizar una exhumación de los restos, pero la directora se quejó de que esta política no se aplica ni está entre las exigencias de las funerarias.

Comunales explicó que la saturación en los camposantos se debe al acelerado envejecimiento de la población cubana y también al aumento de la mortalidad durante la pandemia

Explicó que "al no acudir los parientes a reclamar los restos de un fallecido por disímiles causas, la funeraria se eroga el derecho de trasladar los restos hacia un osario". Otras de las "desgracias", agregó, es que la empresa cuenta, desde 2006, con un solo vehículo para los entierros, y que, "por más que lo arreglen, muchas veces no funciona".

La funcionaria reconoció que Comunales tiene un mal servicio y debe mejorarse, pero rechazó asumir cualquier responsabilidad y dijo que "nadie carga la culpa de las carencias", así como que los trabajadores de la institución están "comprometidos".

Juan Permuy Felipe, intendente de Artemisa, aseguró que 130 personas fueron sepultadas en tierra en 2021, víctimas del coronavirus, lo cual llevó al colapso al cementerio de la ciudad. Ante la saturación, ese año se construyeron 90 nuevos compartimentos divididos en tres secciones, cada una con capacidad para 30 tumbas, mientras que para 2023 se tiene prevista la construcción de 150 espacios adicionales.

Los vecinos también se han quejado de la contaminación en el aire por la actual ubicación de la chimenea del incinerador de los restos

Se esperaba que una mipyme entregara el 28 de abril las primeras bóvedas, pero fue "imposible" por la falta de cemento. Los vecinos también se han quejado de la contaminación en el aire por la actual ubicación de la chimenea del incinerador de los restos, por lo que el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente ha exigido moverla a otra locación dentro del camposanto.

El Artimiseño también cita a Valentín Cordero Pérez, director de Producción y Servicios de la Empresa Provincial de Comunales, quien lamentó la cifra "irrisoria" del presupuesto para el mantenimiento de los cementerios municipales, de apenas 11.000 pesos. El funcionario señaló que los camposantos no tienen ni muros de contención, lo cual ha ocasionado la "profanación de tumbas".

"El mobiliario del incinerador de restos óseos está guardado desde 2013, pero nunca se microlocalizó en Artemisa. Del mismo modo, no se ha aprobado proyecto o presupuesto para el de cadáveres, pese a que la empresa Acinox tiene concebido uno", explicó.

Los Servicios Comunales de la provincia cuentan con 14 vehículos, pero de esos solo siete funcionan. "¿Qué hacemos? Enviar el más cercano y disponible", dijo Cordero Pérez, que reconoció que así como en algunos casos pueden tardar 30 minutos, en otros la demora es de dos horas.

Entretanto, agregó el diario provincial, las familias cubanas han recurrido a la compraventa de las bóvedas entre particulares para aliviar "la necesidad urgente de encontrarle reposo eterno a un ser querido".

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