"Comprar víveres" un 18 del mes es un delito si lo hace Jenny Pantoja, detenida por la Policía

La Habana/La antropóloga y activista Jenny Pantoja fue detenida tras salir de su vivienda este sábado y liberada horas después. El arresto coincidió con la fecha en la que usualmente la activista se manifiesta, el día 18 de cada mes, en solidaridad con la profesora Alina Bárbara López y para pedir cambios políticos en la Isla, pero esta vez, asegura, había salido para “comprar víveres”. 

Tras su liberación, Pantoja publicó en Facebook lo sucedido pese a que ha sido advertida en varias ocasiones de no publicar en redes sociales sus encontronazos con la Seguridad del Estado. “Está es la única vía que ustedes y el desgobierno cubano han dejado para que los cubanos podamos hacer denuncias y quejarnos. No queda otra”, protestó en su publicación.

Según explicó, desde hace un año y nueve meses se manifiesta mensualmente por una “Asamblea Nacional Constituyente elegida democráticamente”, “la crítica situación de ancianos, jubilados, pensionados y familias que están en pobreza extrema”, la “libertad inmediata para los presos políticos cubanos” y el “cese del hostigamiento a personas que ejercen su libertad de expresión”. Sin embargo, “en vistas de que tenía vigilada la casa y como sé que pretenden fabricarme otra causa, decidí hacer la manifestación otro día como también he hecho otras veces”, aclaró Pantoja.

La salida de su casa la hizo para comprar alimentos en una feria cercana a su vivienda, pero aún así fue detenida “violentamente” por la patrulla 019 que la vigilaba ese día. Tras ser liberada horas después, la coordinadora del Comité Pro Amnistía para los presos políticos en Cuba prosiguió con las compras, pero vigilada de cerca por agentes de la policía política.

La antropóloga también denunció el acoso a vecinos y personas que intentan acercarse a su casa

La antropóloga también denunció el acoso a vecinos y personas que intentan acercarse a su casa. “Uno de los clientes para los que mi esposo hizo un arreglo de cerrajería vino a buscar su pertenencia ya arreglada y Ariel –el agente encargado de Pantoja– lo llamó. No sé lo que le habrá dicho pero el señor, vecino nuestro, se fue sin su candado arreglado”, lamenta la activista.

“Las personas que vienen a mi casa no tienen restricción domiciliaria, por lo tanto pueden transitar libremente y buscar uno de los pocos trabajos que había hecho hoy mi esposo”, añadió.

El caso de Pantoja, que fue expulsada de la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana en julio pasado y acosada en innumerables ocasiones por su posición política, contrasta con la excarcelación de varias decenas de presos políticos en la última semana que el régimen ha mostrado como un acto magnánimo.

Hasta la tarde del sábado, según el registro del Observatorio Cubano de Derechos Humanos, habían sido excarcelados unos 88 presos políticos. Este domingo, la ONG Justicia 11J anunció la salida de prisión de otros: Yarelis Mesa Vázquez, Adel de la Torre, Yoennis Domínguez de la Rosa, Santiago Vázquez León, José Antonio Gómez León y Rolando López Rodríguez.

Hasta la tarde del sábado, según el registro del Observatorio Cubano de Derechos Humanos, habían sido excarcelados unos 88 presos políticos

La académica ha sido detenida en más de una ocasión, aunque el arresto que sufrió el pasado junio junto a la profesora Alina Bárbara López fue uno de los más agresivos. En esa ocasión, la antropóloga denunció que ambas habían sido golpeadas por los agentes de la policía política.

Pantoja es una experimentada historiadora e investigadora cubana, además de activista, con estudios de maestría en el área de las Ciencias Sociales y Filosóficas, especializados en el tema religioso.

En el ámbito docente ha tenido una extensa labor en las enseñanzas de nivel medio superior y superior, llegando a ser profesora adjunta de la Universidad de La Habana en la disciplina de Antropología. A la par, ha impartido postgrados y dictado conferencias como parte de su paso por instituciones como el Instituto Cubano de Antropología.