La crisis del azúcar en Cuba: hay poca, cara y pone en jaque a las ‘mipymes’
La libra se vende hasta en 500 pesos en comercios privados
La Habana/El azúcar vuelve a escasear en Cuba. Su distribución en el mercado racionado tiene retrasos de meses, o no ha llegado a todas las provincias. La que se puede conseguir, poca, es en comercios privados por hasta 500 pesos la libra.
Así las cosas, la frase popular que evidencia la tradicional importancia de este producto para la Isla –"sin azúcar no hay país"– suena a broma macabra. Aquí, dice a 14ymedio Roberto, un vecino de Santiago de Cuba, "se endulza todo, aunque no sea saludable. Cuando no hay que comer, incluso se le echa al pan o se prepara un vaso de agua con azúcar”.
Sin embargo, obtenerla en la actual crisis no es sencillo. “Donde vivo, por ejemplo, no hay. Hay que ir a buscarla a otro lado”, cuenta. Después de peregrinar por la ciudad, Roberto encontró la libra a 400 pesos: “Muy cara”.
La escasez tiene repercusiones no solo para los consumidores finales, sino para pequeñas empresas.
La dulcería de nuestro barrio no ha podido volver a abrir porque las cuentas no dan con el nuevo precio del azúcar
Maribel, vecina de Nuevo Vedado, en La Habana, presenció hace unas semanas el cierre de un comercio privado de su barrio por falta de azúcar: “La dulcería de nuestro barrio no ha podido volver a abrir porque las cuentas no dan con el nuevo precio del azúcar. Era una mipyme, pero ya está en liquidación. Es una pena, porque su dueña, una mujer de unos 50 años, daba empleo al menos a dos jóvenes de la zona que ahora se han quedado sin ingresos”.
Según la habanera, “la gente que se quejaba de lo caros que estaban los dulces en la mipyme, ahora suspira cuando pasa frente a su puerta porque era el único negocio de pastelería, cakes y panetelas de varias cuadras a la redonda”.
En redes sociales, los internautas también preguntan con desespero si alguien vende el producto a precios accesibles, ya sea para la merienda de los hijos o para elaborar algún postre que aplaque el hambre. “Llevo días tratando de encontrar azúcar, de la que sea, blanca o parda, solo eso. En las mipymes cerca de casa el kilogramo lo venden a 950 pesos”, señala una usuaria en Facebook, que recuerda con nostalgia “el país de la caña de azúcar, en los tiempos en que hasta un milordo (agua endulzada) era muchas veces desayuno, merienda y postre”.
A los altos precios se suman las fallas en la distribución a través del mercado racionado, que en los últimos meses no se ha cumplido prácticamente. De hecho, en algunas provincias apenas ha llegado una parte de los alimentos que conforman la canasta básica subsidiada.
A los altos precios se suman las fallas en la distribución a través del mercado racionado, que en los últimos meses no se ha cumplido prácticamente
El kilogramo de azúcar está ahora por encima de los 2 dólares en algunos portales de internet que se dedican a vender productos a los emigrados para sus familiares en la Isla. Al cambio informal el precio equivale a unos 350 pesos la libra. Con ese valor, sentencia Maribel, era imposible que la dulcería de su barrio se mantuviera en pie: “La falta de azúcar la enterró”.
Una desaparición similar del producto fue reportada por 14ymedio en noviembre del año pasado. La emblemática heladería Coppelia, en el corazón de El Vedado habanero, cerró debido a que en la fábrica que la abastece no había “leche ni azúcar”.
La industria de la medicina natural también ha sido víctima del derrumbe de la producción cañera. Entre los problemas para generar estos medicamentos no solo está la falta de algunas plantas. Se precisan hasta 15 materias primas importadas, además de alcohol –para extraer los metabolitos activos de las plantas– y azúcar, básica para la elaboración de jarabes.
Asimismo, los roneros cubanos temen que este año la producción de la bebida se vea mermada por el fracaso de la zafra de la temporada pasada y el previsible fiasco de la actual. Directivos de las marcas exportadoras –Havana Club, Ron Santiago y Ron Vigía–señalaron que “se siente el golpe” de la escasez de azúcar en la industria.
Ahora se ha visto obligada a importar gran parte del azúcar que precisa para su población y es incapaz de cumplir con los contratos de exportación
Tradicionalmente, Cuba consumía 700.000 toneladas y exportaba el resto, pero con la producción actual, el panorama ha cambiado radicalmente: ahora se ha visto obligada a importar gran parte del azúcar que precisa para su población y es incapaz de cumplir con los contratos de exportación.
Desde al menos 2020, cada zafra que se realiza en la Isla es catalogada como la peor de los últimos 100 años. Aún no se sabe cuál es la cantidad proyectada para la contienda 2024-2025, pero las autoridades esperan que la producción supere las 350.000 toneladas de azúcar obtenidas en 2023, una cifra apenas mayor que la mitad de lo que produjo en el mismo lapso (600.000 toneladas) la República de Mauricio, una isla de 2.040 kilómetros cuadrados al este de África que es 50 veces menor que Cuba.