Cuba anuncia una nueva tasa de cambio para el dólar que varíe "con la oferta y la demanda"

Madrid/El primer ministro, Manuel Marrero, reconoció este miércoles la pérdida de confianza de los ciudadanos en el sistema bancario estatal cubano. En su intervención ante la Asamblea Nacional del Poder Popular, aseguró que el Gobierno va a introducir un nuevo régimen cambiario en el país –frente al actual con cambio fijo– con "mayor flexibilidad", que varíe de acuerdo con las "condiciones de oferta y demanda" y con "una tasa al día", con el objetivo es que el Estado pueda competir en el negocio cambiario, que actualmente se produce mayoritariamente de forma irregular.

No indicó, sin embargo, cuándo entrará en vigor ni cuál será el tipo de cambio inicial entre el peso cubano (CUP) y el dólar (USD). Cuba tiene dos tipos de cambio oficiales, uno para personas jurídicas (1 USD = 24 CUP) y otro para personas físicas (1 USD = 120 CUP), pero en la calle, el billete verde estadounidense se está cambiando actualmente por unos 320 pesos.

"Es un proceso que irá poco a poco pero nos permitirá entrar de lleno y que el banco no esté al margen de todo ese mercado cambiario ilegal", añadió el jefe del Gobierno. El propósito es que "las personas" se sientan "atraídas" y con "más confianza" para "vender sus divisas al sistema bancario" y que éste "pueda vender divisas a la población".

De igual forma, el primer ministro aseguró que el Gobierno aprobará que las empresas, con previa autorización estatal, puedan cobrar sus productos y servicios en divisas. "Hay que reconocer que la economía se ha dolarizado a partir de la existencia de un mercado cambiario ilegal, incluso cada vez que se pone un precio" en un negocio privado "y se toma como referencia" la tasa del mercado informal, esgrimió. "Evidentemente, aunque se esté pagando con moneda nacional, eso está dolarizado".

Criticó, asimismo la alta circulación de efectivo en la economía, a pesar de la intensa campaña iniciada desde 2023 por el Gobierno para digitalizar las transacciones. De acuerdo con datos preliminares compartidos por Marrero, se registró un incremento interanual del 26% en la cantidad de billetes circulantes, un factor, afirmó, que "impacta en los índices de inflación".

El Gobierno siente "insatisfacción", dijo también, por los avances de las directrices, que incluyen la disminución y eliminación de subsidios

Al hacer un repaso de las medidas anticrisis, anunciadas hace un año e implementadas durante 2024, el primer ministro también concedió que la política económica no ha "avanzado lo necesario" y solo ha arrojado "discretos resultados".

El Gobierno siente "insatisfacción", dijo también, por los avances de las directrices, que incluyen la disminución y eliminación de subsidios (que significó, entre otras cosas, un aumento del 400% en el precio del combustible) y amplios recortes al gasto público. A pesar de los resultados, Marrero dijo que el "camino de ir eliminando subsidios no tiene marcha atrás".

Por otro lado, afirmó que el azote de los huracanes Oscar y Rafael y los dos sismos de gran magnitud en Granma han mermado las finanzas públicas en 2024 y limitado la capacidad de maniobra del Estado en medio de una "economía de guerra".

Otra de las medidas que no logró resultados positivos fue el aumento en la factura eléctrica de los grandes consumidores, dijo Marrero, por lo que el Gobierno buscará "nuevas fórmulas". Sorprendentemente, el funcionario no mencionó el decreto publicado el pasado 26 de noviembre, que obligará a esos "grandes consumidores", precisamente, a producir el 50% de la energía que gastan a partir de 2028.

El país caribeño pasa por una precaria situación en su sistema eléctrico, que sufrió tres colapsos totales a finales de año.

En ese sentido, el jefe del Gobierno señaló que para 2025 la isla generará 1.200 megavatios (MW), esto es, menos de la mitad de la demanda total, a través de parques fotovoltaicos.

Por otro lado, Marrero afirmó que Cuba ha recaudado cerca de 40,8 millones de dólares en multas a empresas privadas que no respetaron el tope de precios a productos como las salchichas, la leche y el pollo anunciado este año.

También cargó contra las empresas privadas que, a su juicio, han vendido productos a sobreprecio por utilizar como referencia el tipo de cambio con el dólar del mercado informal.

Además, advirtió: "la fiscalización a los grandes negocios con conductas evasivas será una prioridad en el próximo período". Al respecto, refirió que las casi 200.000 "acciones de control fiscal" determinaron adeudos por más de 6.000 millones de pesos. Por deudas fiscales (en total, 1.202 millones de pesos), informó también, se ha regulado –es decir, se le impedirán salir del país– a 9.248 personas.

El primer ministro anticipó que el país prevé un déficit para 2025 de 88.500 millones de pesos cubanos (3.687,5 millones de dólares, al cambio oficial para personas jurídicas), una cifra similar a la de este año y a la de los dos ejercicios previos.

El jefe del Gobierno insular ya había indicado la semana pasada, en el pleno del comité central del Partido Comunista de Cuba (PCC), que el déficit para este año iba a estar finalmente en torno a los 90.000 millones de pesos, 57.000 millones menos de lo inicialmente previsto en las cuentas públicas.

Economistas independientes como Pedro Monreal y Pavel Vidal indican que este volumen de déficit rondaría en torno al 10% del producto interno bruto (PIB), lo que supone una de las mayores tasas del mundo.