El Gobierno arremete contra las becas para jóvenes cubanos en Estados Unidos
La Habana/La batalla ideológica del oficialismo tiene un nuevo enemigo: las becas ofrecidas por la organización estadounidense World Learning a jóvenes cubanos entre 16 y 18 años. En los últimos días en los centros preuniversitarios y universitarios del país se han sucedido los matutinos de “condena y protesta enérgicas” ante lo que los medios estatales califican de “maniobra imperial”.
La televisión nacional ha brindado una amplia cobertura de los actos de “reafirmación revolucionaria” en los que se critica duramente el programa de verano que ofrece la organización estadounidense, sin fines de lucro, para ciudadanos residentes en la Isla. Una arremetida ideológica que no se veía desde los días de la campaña por la liberación de los cinco espías cubanos presos en Estados Unidos.
World Learning lleva dos años ofreciendo becas de cuatro semanas, entre los meses de julio y agosto, para estudiantes cubanos de secundaria, pre y universidad. La organización busca desarrollar en estos jóvenes “habilidades en áreas que incluyan hablar en público, trabajar en equipo, negociar, fomentar consenso, resolución de conflictos, defender los derechos propios, y solución de problemas”.
Una agenda que el oficialismo cubano ha tildado de “hostil e injerencista”. La presidenta de la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media, (FEEM), Suzanne Santiesteban, llamó a extender los actos de repulsa en todos los centros docentes de la enseñanza media y superior de todo el país. En los próximos días se realizarán hasta 460 de estos mítines.
Durante los dos años en que ha existido, el programa de becas se hizo muy popular entre los adolescentes cubanos y la convocatoria para su edición de 2016 se distribuyó ampliamente en las redes alternativas de información. “Todo el mundo hablaba de eso en los pasillos y entre los turnos de clase”, afirma Fabián de 17 años y estudiante de preuniversitario en la ciudad de Pinar del Río.
Durante los dos años en que ha existido, el programa de becas se hizo muy popular entre los adolescentes cubanos y la convocatoria para su edición de 2016 se distribuyó ampliamente en las redes alternativas de información
“La gente estaba muy ilusionada, porque era la posibilidad de viajar con todos los gastos pagos y conocer otra realidad”, comenta el joven a este diario. Aunque explica que prefirió no postularse para la beca porque en su padre es militante del Partido Comunista y en reuniones del núcleo “les advirtieron que podían perder el carné” si permitían a sus hijos viajar a Estados Unidos a través de World Learning.
Ahora, la repulsa oficial ha salido de los círculos partidistas y se extiende a las aulas donde estudian los potenciales aspirantes a las becas. Con el ánimo de parar en seco el entusiasmo que estaba causando el programa, Suzanne Santiesteban asegura que la organización recibe financiamiento de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), a la que clasificó como una “conocida herramienta de subversión”.
“En el aire se huele que están molestos”, declara Yadira Machado, madre de un joven de 16 años que espera poder acceder a la beca el próximo verano. “Le he dicho a mi hijo que haga oídos sordos a todo eso, porque esa es la oportunidad de su vida”, sentencia la mujer, residente en el municipio habanero de 10 de Octubre.
Sin embargo, en la casa de Machado no todos comparten la misma opinión. El abuelo del joven cree que la ONG estadounidense está “captando muchachos para convertirlos en contrarrevolucionarios”. Una opinión que se asemeja a la advertencia de las autoridades que enmarcan la iniciativa de World Learning dentro de la “nueva estrategia” de la Casa Blanca enfocada en las nuevas generaciones.
El rechazo a las becas para jóvenes ha venido acompañado por varios artículos aparecidos en la prensa oficial en los que se atacan también a los medios informativos independientes. La “nueva contrarrevolución necesita de una nueva prensa” sentenció sobre el tema un conocido agente de la Seguridad del Estado. La arremetida ideológica apenas parece estar comenzando.