El nombre y la imagen de Fidel Castro se envuelven en prohibiciones
Miami/El parlamento cubano aprobó este martes por unanimidad un proyecto de ley por el cual el nombre del fallecido exgobernante Fidel Castro no podrá ser usado para designar espacios públicos y se prohíbe comercializar su imagen.
"Quieren mantener la imagen de Fidel Castro con ese halo de misterio que siempre lo caracterizó. Se encargaron de presentarlo al pueblo como un superhombre, del cual apenas teníamos información sobre su vida privada, hay que estar atentos porque podría tratarse de una maniobra para convertirlo en un símbolo nacional más", dice la columnista Miriam Celaya desde La Habana. "No quieren que pase lo mismo que ocurrió con Ernesto (Che) Guevara", afirma.
La imagen del Che ha sido comercializada indiscriminadamente y convertida en un símbolo de rebeldía y de pertenencia a los movimientos de izquierda en todo el mundo. Se pueden encontrar desde calzoncillos con su figura hasta banderas nacionales. En Cuba, buena parte de la artesanía que se vende a los turistas lleva la imagen del guerrillero argentino.
La ley, cuya discusión había sido anunciada en los funerales de Castro, supuestamente corresponde a la voluntad del finado, quien pidió evitar el uso de su nombre en plazas y avenidas, así como prohibir la construcción de estatuas o la emisión de monedas con su imagen.
Aunque los diputados consideraron que Castro mereciera "esas formas tradicionales de homenaje, o incluso superiores", decidieron acatar su voluntad a propuesta de su hermano, el general del Ejército y presidente cubano Raúl Castro.
"Quieren mantener la imagen de Fidel Castro con ese halo de misterio que siempre lo caracterizó", opina la columnista Miriam Celaya
"Únicamente el respeto sagrado a su voluntad, expresión de la humildad y modestia que le caracterizaron, y el haber hecho siempre honor a la prédica martiana de que toda la gloria del mundo cabe en un grano de maíz, nos conduce a asumir un texto legal de tal naturaleza", destacaron los diputados, según recoge la prensa oficial.
La Asamblea Nacional, no obstante, exceptúa el uso del nombre de Castro para la creación de alguna casa de estudios sobre "su invaluable trayectoria".
"Quieren evitarse el hecho de que una vez destruida la tiranía sus estatuas sean derribadas por un país libre", dice José Daniel Ferrer, líder de la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu), una organización opositora en el oriente de la Isla.
Para Ferrer, la ley aprobada busca "justificar" el culto a la personalidad que el Gobierno ha impuesto a la nación y que el dirigente de la Unpacu califica de "enfermizo".
"Han tenido al país repleto de sus imágenes y consignas desde hace décadas. Como Castro sabe que cuando las tiranías caen desaparecen sus símbolos, parece que quiso evitar un espectáculo como los de la antigua URSS", comenta.
Para Ferrer, la ley aprobada busca "justificar" el culto a la personalidad que el Gobierno ha impuesto a la nación
Para Elisa Valdés, una ama de casa de la provincia de Cienfuegos, la ley pone el nombre de Fidel casi a la par del de Dios. "Es como si fuera sagrado", dice al teléfono. En vez de "no usarás el nombre de Dios en vano, ahora tendremos que decir: no usarás el nombre de Fidel en vano", comenta con ironía.
La legislación también prohíbe "el uso de denominaciones, imágenes o alusiones de cualquier naturaleza referida a la figura del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz para su utilización como marca u otros signos distintivos, nombre de dominio y diseños con fines comerciales o publicitarios".
No queda claro si se eliminarán todas las fotos artísticas e imágenes de Fidel Castro que son vendidas en las áreas turísticas, desde postales alusivas al difunto líder hasta pulóveres con su efigie.
Según especifica la prensa cubana, se trataría de "evitar el uso de la figura del líder de la Revolución en el tráfico mercantil o con fines de publicidad comercial", aunque no limitaría el uso artístico o las fotografías y pancartas que se utilizan hasta el día de hoy en empresas estatales, muros, vallas propagandísticas y hasta piedras a las orillas de las calles.
"Para todos los agradecidos que siempre acompañarán al compañero Fidel, resultarán pocos los homenajes que se le rindan", dijeron los más de 600 diputados que conforman el ente unicameral en la última sesión de este año.