Cuba incumple su objetivo de mandar 200.000 toneladas de piedra a México al mes
Se cumple un mes desde el anuncio de esta exportación y aún no se ha cargado el primer barco
La Habana/Un mes después del anuncio de que Cuba comenzó a llenar el primer barco con la piedra rajón, que exportará a México para la construcción del polémico proyecto del Tren Maya, la nave sigue atracada en la zona portuaria número dos de O'Bourke, del puerto de Cienfuegos.
El Gobierno cubano confirmó el 11 de diciembre pasado que exportará hasta 200.000 toneladas mensuales del material, del que ya tenía almacenada la décima parte.
Sin embargo, César Rosell León, director de la Empresa de Servicios Portuarios del Centro, admitió que el buque "pionero" apenas ha sido cargado con la mitad del primer envío previsto, de 25.000 toneladas piedra para hacer gravilla, y que esperan concluir el embarque "en apenas unos días", publicó este miércoles la Agencia Cubana de Noticias (ACN).
El funcionario incluso aseguró que una segunda nave se encuentra anclada en el puerto a la espera de cargar otras 18.000 toneladas.
Según el director, los operarios del muelle tienen "gran experiencia" en el manejo de cargas a granel, como maíz o soya, pero son labores "mucho más nobles" en comparación con cargar la roca, por lo que estas actividades "resultan novedosas" para los predios portuarios.
César Rosell León, director de la Empresa de Servicios Portuarios del Centro, admitió que el buque "pionero" apenas ha sido cargado con la mitad del primer envío previsto, de 25.000 toneladas piedra para hacer gravilla
La manipulación de las piedras, algunas de hasta un metro de tamaño, es una "tarea fuerte y rústica" para las cuales se requiere varios tipos de transporte y cargueros con experiencia en el sector de construcción y transporte automotor. Al principio, agregó el director, el proceso resultó "un poco engorroso", pero las brigadas lograron adaptarse con una manipulación de 4.500 toneladas diarias.
El material se extrae de la cantera de Arriete, en el municipio cienfueguero de Palmira, y luego se transporta por ferrocarril a los almacenes a cielo abierto en la zona portuaria. Después, los cargueros de construcción o transporte acercan las piedras al muelle y, con un sistema muy rudimentario de grandes contenedores de acero, que llaman jaulas, las suben al barco con grúas.
Las autoridades cubanas aseguran que ese material servirá como gravilla para el "acolchonamiento o soporte a las vías" del Tren Maya, una línea férrea de unos 1.550 kilómetros que recorrerá los tres estados de la península de Yucatán (Yucatán, Campeche y Quintana Roo) "en respaldo al desarrollo sostenible de sus pueblos", señala la nota de ACN, omitiendo varias denuncias que advierten de que el proyecto es nocivo por la destrucción de ecosistemas completos de selva y cenotes (manantiales subterráneos).
Las organizaciones ambientalistas y la oposición acusan al Gobierno de Andrés Manuel López Obrador de pasar por alto la legislación ambiental para construir el proyecto, catalogado como "obra de seguridad nacional". Además, señalan supuestas irregularidades en la financiación, que sobrepasa los 15.000 millones de dólares.
El Gobierno cubano prevé que en el primer mes de comercialización se manipulen 90.000 toneladas de piedra y que, gradualmente, se incremente hasta llegar a un ritmo de 200.000 mensuales.
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