Primer caso de transmisión local y primer muerto cubano por covid-19 en la Isla

La Habana/Las autoridades sanitarias anunciaron este viernes el primer fallecimiento de un cubano en la Isla –los otros dos son un italiano y un ruso– y reconocieron el primer caso de contagio local de covid-19, que hasta ese momento solo se había dado a partir de extranjeros o viajeros nacionales que habían entrado en el país con la enfermedad.

El ministro de Salud cubano, José Ángel Portal, informó este viernes durante el espacio televisivo de la Mesa Redonda que el contagio local ocurrió en el "municipio de Cárdenas, de la provincia de Matanzas" y se produjo a partir de un animador de un hotel de Varadero.

El hombre fue diagnosticado con covid-19 después de resultar contagiado por "un grupo de turistas italianos", y su caso fue incluido en el listado de positivos por coronavirus que se difundió el pasado 21 de marzo.

A partir de este paciente se identificaron 53 contactos, que pasaron a estar en aislamiento y en vigilancia epidemiológica

El fallecido se nombraba Saúl Díaz y era un pastor evangélico residente en el municipio Remedios, de Villa Clara, según una información difundida por el portal CiberCuba. Díaz publicó en sus redes un mensaje cuando ya presentaba síntomas de la enfermedad y en el que anunció que él y su esposa serían trasladados al hospital.

A partir de este paciente se identificaron 53 contactos, que pasaron a estar en aislamiento y en vigilancia epidemiológica, y de los cuales resultaron positivos al nuevo coronavirus cuatro familiares y un amigo.

Hasta este sábado, en Cuba se habían confirmado 119 casos positivos por covid-19, 2.000 personas aisladas en observación y 3 fallecidos, el último de ellos un cubano de 52 años de edad.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) había reportado a Cuba como un país con transmisión local de covid-19 desde el pasado 19 de marzo, pero no fue hasta viernes que las autoridades del Ministerio de Salud Pública lo confirmaron.

Por otra parte, el Gobierno cubano anunció este viernes 27 de marzo del 2020 medidas en el sector de la economía y el comercio minorista enfocadas en dar prioridad a la producción de alimentos y controlar su distribución para evitar las aglomeraciones ante el complejo escenario creado por la pandemia de covid-19.

El viceprimer ministro, Alejandro Gil, explicó durante una comparecencia televisiva que se dará prioridad a la producción de alimentos en la Isla y a concentrar los recursos en productos básicos, como las producciones de cemento, medicamentos, artículos de aseo y las fuentes renovables de energía.

"A esta situación debemos responder de una manera ordenada, que permita tomar un grupo de decisiones para enfrentar la pandemia con el menor costo económico posible y que nos permita recuperarnos", recalcó el también titular de Economía y Planificación.

Gil llamó a buscar soluciones "por nuestras propias manos" que en el área de la alimentación se traducen en potenciar las producciones agropecuarias con los cultivos de ciclo corto y la agricultura en espacios urbanos de productos como el plátano, maíz, carne de cerdo, arroz, frijoles y huevos.

El ministro dijo que se está llevando a "punta de lápiz" la importación de productos básicos para la alimentación de la población, un renglón al que el país dedica más de 2.000 millones de dólares al año. "Es evidente una restricción de ofertas de las importaciones porque los países producen menos, así como dificultades para el acceso a fuentes de financiamiento y crédito externo, lo cual evidencia una disminución de los niveles productivos en el país y en la inversión extranjera", expresó.

En las últimas semanas la red comercial de la Isla ha sufrido nuevamente el desabastecimiento de productos como el pollo, la leche en polvo, el queso, el yogurt y el detergente lo que ha provocado largas colas y aglomeraciones no recomendadas en tiempos del contagioso coronavirus.

Desde el pasado martes comenzaron a regularse las colas, guardando la distancia convenida de al menos un metro entre personas

Desde el pasado martes comenzaron a regularse las colas, guardando la distancia convenida de al menos un metro entre personas. Los comercios deben procurar la separación y es preciso evitar los desórdenes, pero el desabastecimiento y los temores populares han hecho prácticamente imposible cumplir con esas medidas.

Ante la crisis, la ministra de Comercio Interior, Betsy Díaz, anunció este viernes la venta "controlada y regulada" de una serie de productos, para evitar el acaparamiento y la reventa. Precisó que hay productos que no podrán comercializarse por la "libreta de abastecimientos".

Desde el próximo 30 de abril se distribuirán adicionalmente y de manera controlada por cada persona 10 onzas de chícharos y una libra de pollo -a un precio no subsidiado de 20 CUP. En el caso de los productos de aseo como los jabones de lavar y de baño, la crema dental y la lejía se van a comercializar con una frecuencia trimestral, en módulos que incluirán una cantidad de esos artículos de acuerdo al número de integrantes de cada núcleo familiar.

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