Cuba recibe ayuda de Japón, además de las entregas de la Unión Europea, Rusia, Brasil y la ONU

La Habana/Después de dos ciclones, dos sismos y una larga temporada de debacle energética, el régimen cubano ha hecho lo que mejor sabe hacer: pedir ayuda a diestra y siniestra. La mano del Gobierno ha permanecido abierta y extendida a las decenas de ayudas que ha recibido a nivel internacional, la última de ellas procedente de Japón.

Una publicación de la embajada japonesa en la Isla anunció el pasado 19 de noviembre que el país estaba dispuesto a cooperar con recursos destinados a 114 damnificados de Artemisa tras el paso de Rafael que perdieron de forma total o parcial sus casas. Esta semana, el cargamento con purificadores de agua, mantas, tiendas de campaña y colchonetas llegó finalmente a la Isla. El envío fue gestionado por la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (Jica) y su valor es de unos 160.000 dólares.

El cargamento fue recibido por una delegación de ambos países en el Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana. “Durante su intervención, el embajador [Kazuhito] Nakamura transmitió sus condolencias a los afectados y dijo que esta ayuda es una muestra de la solidaridad de Japón hacia Cuba, ya que ambos países coinciden en el enfrentamiento a los desastres naturales”, narra el comunicado.

El evento fue, precisamente, el estreno de Nakamura como diplomático en la Isla tras entregar sus credenciales el pasado 20 de noviembre a Miguel Díaz-Canel y al canciller Bruno Rodríguez.

El embajador recordó además que no es la primera vez que Japón envía donaciones a Cuba. “Similares acciones del pueblo y Gobierno japoneses en situaciones de desastres en Cuba” se realizaron tras el paso de los huracanes Sandy (2012), Matthew (2016), Irma (2017) e Ian (2022).

Desde 2018, Japón también mantiene ocho programas de Asistencia Financiera no Reembolsable a Gran Escala

Desde 2018, Japón también mantiene ocho programas de Asistencia Financiera no Reembolsable a Gran Escala en la Isla. Uno de estos proyectos fue el que asistió a los pobladores de Pinar del Río tras el azote de Ian. Entonces, el donativo incluyó “23 purificadores de agua, igual cantidad de tanques sencillos para almacenar el líquido, y 50 carretes de cables y adaptadores”, enumeraron entonces las autoridades niponas.

Según explicó entonces el ex embajador Kenji Hirata, la asistencia de su país a la Isla se enfoca principalmente en la agricultura, la energía, el medio ambiente y el transporte. En este último caso, resaltan la donación de 84 guaguas japonesas en 2022 a la empresa de transporte de La Habana y los 24 camiones de basura entregados en 2019.

Tokio también concede a La Habana microcréditos de hasta 130.000 dólares con un programa de asistencia –que tampoco deben reembolsar– para la Seguridad Humana, pensado para la atención inmediata a pueblos pequeños tras desastres puntuales

“Por ejemplo, en unos pueblos intrincados de Cienfuegos instalamos equipos de bombeo basados en energía renovable, y los habitantes recibieron un suministro más estable de agua, mientras el Gobierno pudo ahorrar dinero invertido en combustible para llevar el líquido por pipas”, dijo el representante.

A través de Jica, Japón “impulsó” con 20 millones de dólares el pasado abril, en Isla de la Juventud, la instalación de parques fotovoltaicos, siguiendo el controvertido plan de transición energética cubano. El proyecto incluye además baterías con capacidad para almacenar 10 MW.

Japón “impulsó” con 20 millones de dólares el pasado abril la instalación de parques fotovoltaicos

“La experiencia puede resultar muy útil para el megaproyecto de 2.000 megavatios que se generarían con paneles solares, primera fase de un ambicioso proyecto gubernamental [cubano] para ir mudando la matriz energética fósil a una renovable”, valoró entonces Hirata.

En cuanto a la alimentación, hasta 2023 Japón había empleado 63.400 dólares en proveer con maquinaria a varias mini industrias de conservas de frutas y vegetales de Matanzas. El plan entonces era colaborar con la fracasada Ley de Soberanía Alimentaria. 

Teniendo en cuenta que, según reportes de la prensa oficial, el total de viviendas dañadas en la provincia fue de 21.037, la ayuda japonesa a 114 personas parece insignificante. No obstante, libera al Gobierno de la Isla de asistir al menos a unas decenas de familias hasta que puedan recuperar sus hogares. 

Además, los recursos se suman a otros tantos enviados por aliados políticos de La Habana, grupos extranjeros de solidaridad, agencias internacionales –la Unión Europea aprobó esta semana 2,7 millones de euros adicionales para apoyar la recuperación en Cuba– y a las propias inversiones de Japón acumuladas por años. Según datos de la Embajada nipona en La Habana, desde 1998 se han empleado 203,06 millones de dólares en Cuba. 

“El Gobierno de Japón envía expertos a Cuba en campos tales como medio ambiente, electrificación, riego, prevención de desastres, etc., y recibe becarios cubanos para cursos de capacitación”, explica en informe.