1/25El edificio que durante años lució un cartel que lo describía como “la Maravilla” ha perdido el esplendor que un día lo convirtió en atracción turística. Ahora, ni siquiera se puede leer ya el cartel
/ 14ymedio 2/25El edificio con el cartel “la Maravilla" antes del derrumbe. (14ymedio)
/ 14ymedio 3/25Frente a una tienda del Estado, una vendedor ambulante de galletas intenta proteger su mercancía de la lluvia
/ 14ymedio 4/25El Capitolio, en la calle Teniente Rey, bajo el cielo encapotado
/ 14ymedio 5/25Un edificio viejo y destartalado en la calle Teniente Rey
/ 14ymedio 6/25A un costado del Capitolio, justo frente al hotel Saratoga, se ha acumulado mucha agua con la lluvia. Algunas alcantarillas cubren por las hojas y los restos de basura, y se forman enormes charcos que carros y peatones deben sortear
/ 14ymedio 7/25Los bicitaxistas esperan bajo la lluvia la llegada de algún cliente. La mayoría de ellos han desplegado lonas laterales para que los pasajeros no se mojen
/ 14ymedio 8/25Una pareja de jóvenes camina por el parque de la Fraternidad abrazada bajo un solo paraguas
/ 14ymedio 9/25Un grupo de trabajadores espera con sus sombrillas para subir al autobús
/ 14ymedio 10/25Los autos corren sobre el asfalto mojado de la Avenida Boyeros
/ 14ymedio 11/25A falta de sombrilla, algunos usan ‘nylon’ o improvisan con cualquier objeto que pueda servir para no mojarse
/ 14ymedio 12/25Dos jóvenes pasean con sombrilla bajo la lluvia
/ 14ymedio 13/25Un vendedor ambulante de mangos en la esquina de Teniente Rey y Villegas se protege en un portal
/ 14ymedio 14/25La cuadra del derrumbe ha quedado cerrada al trafico y todavía los vecinos están incrédulos y no salen de la calle, donde comparten con los transeúntes la historia de su desgracia
/ 14ymedio 15/25La señora de la camiseta azul es Adelaida, una de las propietarias del inmueble afectado por el derrumbe. Ella afirma que esto se hubiera evitado si no fuera por las trabas que le pusieron para reparar su vivienda
/ 14ymedio 16/25Los restos del derrumbe han quedado en el medio de la vía. Los vecinos sostienen que les han dicho que, durante la jornada del jueves, comenzarán a derrumbar lo que ha quedado y a recoger los escombros
/ 14ymedio 17/25Algunos curiosos se acercan para conocer la historia de primer mano
/ 14ymedio 18/25Los restos de una demolición colindante al derrumbe que ocurrió hace tres años. Según los vecinos, eso provocó afectaciones colaterales en el techo del n.418
/ 14ymedio 19/25La fachada del 418, donde se puede ver la escalera llena de escombros. Los vecinos se quejan porque no han podido entrar a buscar ni ropa ni la leche de los niños
/ 14ymedio 20/25Leticia Ramirez, embarazada de 20 años, salió ilesa del derrumbe y ahora reclama una mejor atención de las autoridades. Cuenta que los bomberos vinieron porque "quedaron atrapadas luego del derrumbe una persona mayor y una niña", además de "otro niño y una persona mayor"
/ 14ymedio 21/25Interior de la vivienda de los bajos que fue apuntalada ayer por una brigada para poder comenzar hoy a tumbar los restos del edificio
/ 14ymedio 22/25El interior de un apartamento del edificio que está al lado del afectado ayer. La empresa eléctrica cortó la corriente para evitar incendios
/ 14ymedio 23/25La comida que las autoridades ofrecieron a los vecinos: chopo, arroz congrí, revoltillo y pan solo
/ 14ymedio 24/25Algunos la tiraron a la calle en señal de protesta. Dice una señora que un perro la rechazó: "Mira para eso, ni los perros se pueden comer eso"
/ 14ymedio 25/25Una calle en los alrededores del lugar, donde también había escombros
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