Despiden de la universidad de La Habana a la antropóloga Jenny Pantoja, cercana a Alina Bárbara López Hernández
El Observatorio de Libertad Académica acusa que la decisión es un acto de "censura"
La Habana/La antropóloga y activista Jenny Pantoja Torres ha sido despedida de la Facultad Miguel Enríquez en la Universidad de Ciencias Médicas de la Habana (UCM-H). Según denunció este jueves el Observatorio de Libertad Académica (OLA), la decisión es un acto de "censura", llevado a cabo por presiones de la Seguridad del Estado.
La profesora estaba bajo contrato y en período de pruebas; sin embargo, tenía una valoración positiva sobre su desempeño magisterial y su jefe en el Departamento de Marxismo e Historia le había prometido que no prescindiría de sus servicios. Aun así, fue destituida en “una maniobra administrativa para ejecutar la cancelación de intelectuales incómodos”, indicó el observatorio.
El acoso contra Pantoja, coordinadora del Comité Pro Amnistía para los presos políticos en Cuba, viene de tiempo atrás. El pasado 18 de junio, fue detenida y golpeada junto a la también profesora Alina Bárbara López Hernández. Tras varias horas en manos de la Seguridad del Estado en la estación de Policía de Playa, en Matanzas, fueron liberadas. Ambas viajaban a La Habana, donde planeaban manifestarse pacíficamente, como hace la historiadora matancera los días 18 de cada mes.
El acoso contra Pantoja, coordinadora del Comité Pro Amnistía para los presos políticos en Cuba, viene de tiempo atrás. El pasado 18 de junio, fue detenida y golpeada
Un día antes, a través de redes sociales, Pantoja Torres había denunciado que recibió amenazas en su móvil desde un número cubano. “Como llegaste a Matanzas muy bien, te alerto es la última vez que vas a llegar a Matanzas”, decía el mensaje repleto de faltas de ortografía.
En su post, la profesora explicó que iba a acompañar a López Hernández, pues no podía dejarla sola “en un viaje a La Habana en el que podría sufrir nuevamente el maltrato policial”. Asimismo, advirtió: “Hago responsable a la Seguridad del Estado, al Gobierno cubano y a sus cuerpos policiales de cualquier cosa que me suceda de aquí en adelante. No he cometido delito alguno, ni tengo ninguna causa legal en mi contra. Solo el espíritu y el ánimo presto a hacer lo mejor para mi país que sufre”. Según contó también, su casa se encontraba vigilada por la Policía política.
El asedio, pese a ser liberada, no terminó. El 21 de junio, el OLA informó que “fue sometida a un nuevo ciclo de amenazas”. Esta vez, la policía política fue a su casa y amenazó con ir “contra su carrera profesional, comunicándole que impedirían que continuase desarrollando su vida laboral”.
De acuerdo con el testimonio, el agente Ariel Arnau Grillet, con “un amplio prontuario como represor, se hacía acompañar del agente Ariel”. En su domicilio, exigieron a la historiadora acceso a su casa, para referirse a “las acciones que está realizando con Alina”.
Los agentes la acusaron de violar varios artículos del Código Penal cubano, pero la docente terminó el encuentro al señalar que no mantendría una conversación sin la presencia de su abogado. Los agentes se fueron, pero lanzaron una amenaza: “Olvídese del trabajo en la facultad y olvídese de todo”. Poco después se apostaron en las cercanías del domicilio de Pantoja y la persiguieron incluso hasta su centro de trabajo.
Un agente de la Seguridad del Estado se presentó en el domicilio de la antropóloga y le impidió abandonar su casa ese día. El policía la amenazó con denunciarla
El OLA reportó un mes después, el pasado 17 de julio, que un agente de la Seguridad del Estado se presentó en el domicilio de la antropóloga y que le impidió abandonar su casa ese día. El policía la amenazó con denunciarla si exponía lo sucedido en redes sociales. Según el observatorio, poco después se desplegó un cerco policial de ocho agentes alrededor de la vivienda: dos policías y seis oficiales de civil: tres hombres y tres mujeres.
A inicios de julio, más de 220 escritores y artistas suscribieron una carta abierta en la que denuncian la “violencia policial” con la que fueron tratadas López Hernández y Jenny Pantoja. “El uso de la fuerza, la criminalización del disenso y el encarcelamiento no resuelven nuestros verdaderos problemas. Todas las cubanas y cubanos tenemos derecho a proponer nuestras ideas para salir de esta crisis”, señalaron los firmantes, entre los que se encuentran el escritor Leonardo Padura, el músico y cantautor argentino Fito Páez y el director de cine Fernando Pérez.
Pantoja Torres es una experimentada historiadora e investigadora cubana, además de activista, con estudios de maestría en el área de las Ciencias Sociales y Filosóficas, especializados en el tema religioso.
En el ámbito docente ha tenido una extensa labor en las enseñanzas de nivel medio superior y superior, llegando a ser profesora adjunta de la Universidad de La Habana en la disciplina de Antropología. A la par, ha impartido postgrados y dictado conferencias como parte de su paso por instituciones como el Instituto Cubano de Antropología.