Díaz-Canel insta a los cubanos a producir su comida para frenar las importaciones
Las compras de pollo a EE UU subieron este año, pero registran una ligera bajada en abril
Madrid/El eco de la reprimenda de Miguel Díaz-Canel este viernes en Majibacoa aún resuena por la Isla: “Aquí hay tierra suficiente para producir para todo el municipio. Para darle comida a toda Las Tunas. Ahora, hay que trabajar”. Unas horas después de esa diatriba, que se ha vuelto habitual en los recorridos del mandatario por la Isla, la publicación de los datos sobre las importaciones de pollo desde Estados Unidos confirmaba una vez más la dependencia del exterior para alimentar a la población cubana.
La descentralización hacia los municipios es parte de la estrategia gubernamental de los últimos años para diluir las responsabilidades de la cúpula del régimen. Y Díaz-Canel recurrió de nuevo a ella en el municipio tunero, donde llamó a los cuadros “a trabajar” para obtener resultados, mientras los funcionarios tomaban apuntes sin levantar la cabeza. El mandatario acusó a los líderes territoriales de pasar el tiempo en oficinas y reuniones y no ir a la base.
“Estamos apartados de la realidad y no transformamos lo que hace falta. Nosotros tenemos que llegar a un momento en que este país se autoabastece de alimentos: eso es lo que nos va a dar soberanía de verdad, no estar dependiendo de importaciones, pero eso hay que creérselo y cada municipio tiene que guapear su comida y no estar pensando en lo que va a entrar por la canasta. La canasta que sea para más”.
"Eso hay que creérselo y cada municipio tiene que guapear su comida y no estar pensando en lo que va a entrar por la canasta"
No ha caído muy bien la expresión empleada por el responsable último del país, entendida por miles de cubanos como una llamada a sacarse las castañas del fuego por sí mismos. En realidad, Díaz-Canel estaba derivando sus competencias a una instancia intermedia mientras, al más alto nivel sigue negociando inversiones e importaciones, además de donaciones, desde países –socios o no– en vez de destinar presupuesto nacional a la seguridad alimentaria en la Isla.
“No podemos venir nosotros a decírselo, deben ser ustedes quienes encuentren las soluciones desde el conocimiento que tienen de su propia realidad. La economía hay que analizarla desde sus indicadores”, espetó el presidente el mismo día en que se conocían los datos de importaciones de pollo desde EE UU para el mes de abril.
Ese mes, la cantidad de carne del ave adquirida en el país vecino cayó con fuerza respecto al mes anterior. Este abril llegaron a la Isla 15.169,6 toneladas del producto, un 42,6% menos que en marzo, cuando la suma ascendió a 26.413, y la mitad que en enero, cuando se superaron las 30.000.
En consonancia, el valor también se redujo, aunque proporcionalmente menos (-38,2%), ya que subió el precio por kilogramo. El cuarto mes del año se gastaron 18,17 millones de dólares, con un costo de 1,2 dólares el kilo (un 8,1% más que el pasado mes, cuando esa misma cantidad estaba a 1,11 dólares. En marzo se pagaron 29,42 millones de dólares por la carne de pollo importada desde EE UU.
En términos generales, el primer cuatrimestre de este año se ha superado el volumen de compra al país vecino en un 2,6%. Hasta abril de 2023, la Isla había importado 86.277 toneladas de carne de pollo frente a las 88.505 de este año. Puesto que las estadísticas no ofrecen disgregada la cantidad que va al Estado y las que se quedan las mipymes, cabría atribuir al aumento de las importaciones a estas últimas.
Puesto que las estadísticas no ofrecen disgregada la cantidad que va al Estado y las que se quedan las mipymes, cabría atribuir al aumento de las importaciones a estas últimas
El aumento del gasto fue de un 18,6%, por la subida del costo del producto, mucho más sustancial que el de volumen, por la subida promedio del kilogramo. Así, en el primer cuatrimestre de 2023, se pagaron desde Cuba 85.666 millones de dólares por el producto, frente a los 101.531 millones del mismo período en 2024. Los pagos, por las leyes del embargo, que autorizan desde 2001 la venta de productos alimenticios y médicos de la población cubana, deben hacerse en efectivo y por adelantado, unas condiciones que el Gobierno señala como gravemente lesivas, aunque el historial de impagos del Estado cubano es una de las razones para estas exigencias.
Desde que se adoptó esta exención, se han vendido productos alimenticios desde EE UU a Cuba por valor de 7.359.331.112 dólares, según los datos del Consejo Económico y Comercial Cuba-EE UU (CubaTrade) hasta este mayo.
“Las exportaciones de carne de pollo de EE UU son la principal oferta de la fuente de proteína animal de mayor consumo en Cuba y compensan la aguda crisis agropecuaria nacional de la cual todavía no se observa la luz al final del túnel”, opinó el economista Pedro Monreal este sábado al detallar las últimas cifras disponibles.
Mientras tanto, en Majibacoa, Díaz-Canel seguía llevando la responsabilidad a la menor escala posible. “Los primeros que tienen que defender a las empresas de su territorio son los municipios, si no, la autonomía municipal no existe”, insistía.
"Los primeros que tienen que defender a las empresas de su territorio son los municipios, si no, la autonomía municipal no existe"
Entre los acompañantes del presidente estaban Roberto Morales Ojeda, secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista, y el primer secretario en la provincia, Walter Simón Noris. Ninguno de los dos entendía, a juzgar por sus palabras, por qué no hay más control y “enfrentamiento a las ilegalidades” y por qué no crecen los miembros del partido. “No podemos acostarnos a dormir quedando cosas por solucionar”, dijo Simón Noris.
Ninguno cuestionó, al menos en voz alta, si en los malos resultados del sector agropecuario tiene algo que ver con que las inversiones del Estado en el primer trimestre del año fueron de apenas 559,7 millones de pesos (2,8% del total), frente a los más de 6.700 millones destinados al turismo.