Cinco dólares por una goma de bicicleta en La Habana, 4.000 pesos en provincias

Sancti Spíritus / La Habana/La escasez de gomas de bicicleta tiene como locos a los cubanos de provincias, donde no hay las opciones de transporte que todavía existen en una ciudad como La Habana. Estos días, en Sancti Spíritus, adquirir una sola unidad puede llegar a costar hasta 4.200 pesos. Y solamente en el mercado informal.

"Aquí nunca sacan gomas y eso que todo el mundo tiene su bicicleta", dice Rayner, que vive a diez kilómetros del centro de Sancti Spíritus y, como refiere, "o vas en guagua, que pasa dos veces al día, o vas a pie". El joven asegura que este mismo martes pagó 3.600 pesos por el neumático de la rueda delantera que le hacía falta, lo mismo que cobra al mes.

Las gomas de su bicicleta, que tiene ocho años, ya no aguantaban más, llenas de zapatos y vulcanizadas por varias partes.

Hace cuatro meses, compró la goma para la rueda trasera y le salió en 4.000 pesos, "y casi llorándole al hombre que me la vendió, porque no hay", cuenta a este diario. Desde entonces, estuvo ahorrando para la delantera.

Mientras tanto, en la capital cubana, este miércoles, una larga cola se formó en una tienda estatal de la Plaza de Carlos III donde habían sacado gomas a la venta, por 5,33 dólares cada una.

Hace cuatro meses, compró la goma para la rueda trasera y le salió en 4.000 pesos, "y casi llorándole al hombre que me la vendió, porque no hay"

Los clientes que salían de ella no llevaban una ni dos, sino muchas. "Aquí yo jamás veo a nadie en bicicleta", comentaba una mujer que pasó por el lugar, extrañada. "Esto lo más seguro es que se las lleven a vender al campo".

Las gomas sufren un gran desgaste en Cuba, no solo por la frecuencia de uso de la bicicleta como medio de transporte sino también por el mal estado de las calles y la pésima situación de los frenos en muchos de estos vehículos, lo que obliga a sus conductores a frenar rozando el neumático con la suela del zapato.

Las calles con grandes zonas donde falta el asfalto y sobran los baches son comunes en toda la Isla pero en las ciudades y pueblos de campo la situación es mucho peor aún. También los objetos en la vía, como botellas rotas, trozos de metal y hasta clavos agregan mayores riesgos. De ahí la necesidad de contar con repuestos frecuentes para reemplazar las gomas que se van deteriorando.

A eso hay que sumarle que la bicicleta es también un medio de transportación familiar, de frecuente uso por los vendedores ambulantes para cubrir un área más amplia con posibles clientes, improvisado camión de mudanzas y es común, además, que se les añadan motores para aumentar su velocidad, un ingenio que se conoce popularmente como riquimbili.

Las bicicletas transformadas en ligeras motocicletas, tras añadirle un motor, también consumen más rápidamente la vida útil de los neumáticos. Pero no todos los que se venden son de buena calidad, las menos valoradas son las gomas llamadas criollas, de factura nacional, mientras que las importadas pueden costar mucho más en el mercado informal.

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