Cuba ingresa más de 3.500 millones de dólares en remesas en especie
La Habana/Los cubanos que viven en el exterior enviaron más de 3.500 millones de dólares en concepto de "remesas en especie" en 2013 según un análisis realizado por The Havana Consulting Group. De esta cifra, 1.906 millones de dólares proceden de EE UU.
Los resultados forman parte de un estudio que analizó las tres formas de envío que existen para hacer llegar mercancías a familiares y amigos en la Isla: los directos con pasajeros, a través de agencias y las compras virtuales en Internet. La mayor parte de las remesas llegaron a Cuba de forma directa, siendo el 54,37% del total. El 42,78% se realizó a través de las agencias mientras que un exiguo 2,85% llegan de compras realizadas por Internet en tiendas canadienses, españolas y cubanas.
Para calcular el valor de la mercancía enviada, el estudio ha aplicado una Guía de Observación en el Aeropuerto Internacional de Miami, entre el 1 de mayo y el 7 de septiembre de 2013, con una muestra de 1.154 pasajeros escogidos al azar. Además, se realizaron 34 entrevistas de profundidad a varios pasajeros (muestra aleatoria) que accedieron a revelar el costo y el contenido de la mercancía que llevaban en su equipaje.
La agencia destaca que el negocio de envío de paquetes tuvo su mejor año en el 2013. Los expertos sitúan en 2.500 libras semanales en productos de la que el 70% son duraderos. Los electrodomésticos están entre los más enviados, destacando los televisores y equipos de música. Los envíos se hacen mayoritariamente a través de agencias especializadas y que cuentan con una licencia emitida por la Office of Foreign Assets Control (OFAC). Esta es también la principal fuente de abastecimiento para los nuevos negocios privados de la Isla, como los paladares, que, asegura el estudio, han sido equipados completamente por esta vía.
"Las drásticas medidas tomadas por el gobierno cubano para contrarrestar el empuje de este descomunal movimiento de mercancías al país no ha tenido el efecto deseado", concluye el estudio, que pide a las autoridades levantar las restricciones y permitir a sus ciudadanos importar y vender como gran paso hacia la creación de un tejido minorista. "La economía cubana no solo necesita grandes inversiones en su macro economía -alusión a la Zona Especial de Desarrollo Mariel-, también requiere un cambio dinámico en su economía minorista".
