Ecuador y México toman medidas para frenar el flujo de cubanos
Miami/México no realizará más puentes aéreos por el momento, ni Costa Rica permitirá a más migrantes cubanos dentro de su territorio, al tiempo que unos 3.500 cubanos se agolpan en el istmo panameño intentando continuar su viaje a Estados Unidos. Este es el panorama en el colofón de la cumbre que reunió a autoridades migratorias de los países implicados en el flujo de migrantes cubanos, desde los Estados Unidos hasta Ecuador.
En la reunión, convocada por Costa Rica para "dar seguimiento" a la crisis que se presentó el pasado año, también asistieron la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo. Los grandes ausentes de la jornada fueron Nicaragua y Cuba, gobiernos aliados que culpan a la política migratoria estadounidense de la actual coyuntura. En el caso de la Isla, el canciller costarricense ha considerado que tiene una disposición a colaborar "muy buena" mediante su embajada, pero matizó que lo haría de una manera "diferente", sin especificar detalles.
Costa Rica calificó de "constructiva" la reunión que, según un comunicado publicado por su Cancillería, "ha sido un encuentro para intercambiar algunas ideas sobre cómo abordar el tema de la migración". El vicecanciller Alejandro Solano también comentó la propuesta de "un estudio normativo para tratar de armonizar las legislaciones" encargado a la OIM, con vistas a darle un enfoque regional a las prácticas que se han estado realizando en cada país.
Por otra parte ha trascendido que Ecuador y México endurecerán las medidas para evitar el flujo de cubanos. En el caso del país andino se elevará el costo de la visa de 100 a 400 dólares, una de las más caras del mundo, mientras que el país azteca ha dejado claro que no facilitará más el traslado de cubanos hacia Estados Unidos. Queda por confirmar si continuará otorgando salvoconductos a los migrantes cubanos que lleguen a Tapachula. Costa Rica ha reafirmado la posición sostenida en las últimas semanas y según su vicecanciller exigirá visado a todo migrante que pretenda cruzar por su territorio.
Mientras la reunión se efectuaba en la capital costarricense, Nicaragua movilizó policías antimotines y militares al puesto fronterizo de Teblillas, en respuesta a un eventual paso furtivo de migrantes por esa localidad limítrofe con el departamento de Alajuela. También trascendió la captura, en Colombia, de Roberto Vega López, un ciudadano cubano que traficaba personas desde la Isla en una complicada ruta que incluía Guyana, la selva amazónica brasileña y Colombia. Al momento de su detención conducía a 15 cubanos a través de estas peligrosas rutas rumbo a Panamá.
Donde cayeron como un cubo de agua fría las conclusiones de la reunión de San José fue en los campamentos de migrantes cubanos en Panamá. Según el testimonio de Yunier Leiva muchos de ellos habían encendido velas durante el día a la espera de un "milagro" que solucionara su difícil estancia allí. "Al final lo que hicieron es darle la razón al Gobierno cubano y ayudar a encerrar todavía más a los cubanos en esa prisión flotante que es Cuba", comentó apesadumbrado.
Para Silvio Enrique Campos, la alternativa que les dejan los cancilleres es "seguir con los coyotes". En conversación con 14ymedio, el migrante asegura que "la falta de respuestas o soluciones y el desespero se apodera de los cubanos en Paso Canoas". A pesar de lo difícil del momento hace un llamado a sus compatriotas a no poner en peligro sus vidas, pues "los muros volverán a caer".
Ante la falta de soluciones a su problemática los migrantes han decidido iniciar vigilias nocturnas con el fin de hacer ver a la comunidad internacional las condiciones en que se encuentran. Un cubano que pidió el anonimato por temor a represalias comentó que cada día salen de Panamá rumbo a Estados Unidos varios grupos de cubanos atravesando las regiones boscosas de la frontera con Costa Rica.
Según afirma, "lo único que han hecho las autoridades al no solucionar de manera ordenada nuestro tránsito ha sido alimentar a las bandas de coyotes que dicen combatir". Asegura además que los traficantes de personas ahora cobran más caro por sus servicios: "Un viaje que te venía costando unos 3.000 dólares ahora se ha convertido en una travesía más peligrosa y mucho más cara, a mi me querían cobrar 7.000 la semana pasada".
Desde Ecuador, la Alianza Nacional Cubana también dio a conocer una nota en la cual anima a los cubanos que han decidido emigrar a no desanimarse. "Sabíamos desde el principio que no iba a ser una tarea fácil", afirman, a la vez que llaman a sus miembros a "continuar apelando a la razón y la humanidad de los gobiernos".
A estas alturas todavía no se sabe qué ocurrirá con los miles de migrantes cubanos que se encuentran varados en Centroamérica. En un informe presentado por las autoridades migratorias panameñas se afirma que el número de cubanos llega ya a 3.500 personas, de los cuales hay más de 150 niños.