Los vecinos del edificio derruido en La Habana Vieja denuncian el estado de las casas colindantes

La Habana/En la mañana de este viernes no quedaban escombros del mortal derrumbe ocurrido la noche anterior en el edificio de la calle Ángeles esquina Máximo Gómez (Monte), donde hasta el momento se ha confirmado una víctima mortal, Rolando León.

Ha sido el propio mandatario Miguel Díaz-Canel quien lo ha identificado, en un tuit en el que, con horas de retraso, también ofreció el pésame a sus familiares.

En la transitada esquina del barrio de Jesús María, en La Habana Vieja, solo quedaba un poco de polvo que dejó el concreto al desplomarse. Una brigada del gobierno provincial apuntalaba el inmueble y suscitaba expresiones de disgusto e intranquilidad de parte de los residentes.

Varios vecinos reclamaban a los trabajadores estatales por los edificios colindantes, que están en las mismas condiciones que el afectado. "A punto de colapsar o peor están estos edificios y todo el mundo se queda callado, después se caen y uno va pa' el hueco y no pasa nada. Uno se muere y todo sigue igual", se quejaba una de las residentes del lugar. "Lo que hay que hacer es protestar", continuó muy airada la mujer.

"¿Con quién voy a hablar? ¿Con la delegada [del Poder Popular]? ¿Qué problema me va a resolver ella?. Estoy cansada de quejarme. He ido a todas partes", gritó desde la multitud otra vecina.

Ya sin mucha vigilancia de la Policía y de agentes de la Seguridad del Estado, 14ymedio pudo confirmar que la persona fallecida, cuya identidad no ha sido aún divulgada por los medios oficiales, es un transeúnte que caminaba sobre las nueve con diez minutos de la noche frente al inmueble.

En el lugar vive una familia con un menor de edad, según contó un residente de la zona. Se observa una palangana en el segundo piso, como consta en las imágenes tomadas por este diario, además de otros objetos personales. "Durante el derrumbe la familia pudo salir, aunque la planta baja, que es donde ellos viven, no se cayó", explicó.

Pese al incidente de anoche y aún sin terminar de apuntalar la vivienda, varios miembros de la familia entraban y salían de la casa y se presume que continuarán viviendo en el lugar.

"El portal [que da hacia la calle Monte] está casi en el suelo, está rajado completamente y se ve que está a punto de caer. Eso yo ni lo apuntalaría. A esas personas hay que sacarlas de ahí y llevárselas para otro lugar", comentaban entre sí otros vecinos que miraban cómo la brigada ponía puntales de madera para sujetar la fachada de la vivienda.

Monte ha sido tradicionalmente una de las arterias comerciales más importantes de la capital cubana. Sin embargo, los años sin mantenimiento, su escaso interés turístico y la desidia la han convertido en una de las calles en peor estado de la ciudad. Transitar por sus portales o adentrarse en sus negocios puede ser considerado un deporte de alto riesgo.

Jesús María es uno de los barrios más pobres de la capital. En enero de 2020, tres niñas fallecieron a unos 700 metros de este punto cuando se derrumbó un balcón en el mismo barrio, entre las calles Vives y Revillagigedo. La estructura se desplomó cuando las menores jugaban al salir de la escuela y estaban en la acera ensayando para los actos por el natalicio de José Martí.

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