EE UU se suma al llamado internacional por la libertad de José Daniel Ferrer
La Casa Blanca muestra “creciente preocupación por la salud” del opositor
La Habana/El Gobierno de Estados Unidos exigió este viernes a las autoridades cubanas que liberen al preso político José Daniel Ferrer, así como a los más de 1.000 “cubanos detenidos injustamente”. A través del subsecretario de Estado para el Hemisferio Occidental, Brian Nichols, la Casa Blanca también señaló la “creciente preocupación internacional por la salud” del opositor y líder de la Unión Patriótica (Unpacu), que se ha visto mermada por las condiciones de la prisión y la reciente huelga de hambre que realizó.
“Condenamos las horrendas condiciones que él y otros presos políticos injustamente detenidos padecen. Hacemos un llamamiento al Gobierno cubano para que libere a Ferrer”, dijo el funcionario. La denuncia se suma a la del Parlamento Europeo este jueves, que, como en 2019, volvió a exigir al régimen que ponga en libertad “de forma inmediata e incondicional” a Ferrer, así como a todas las personas “detenidas por motivos políticos y arbitrariamente por ejercer sus derechos de libertad de expresión y de reunión pacífica”.
La resolución no vinculante fue aprobada con 380 votos a favor, 182 en contra y 51 abstenciones. En el llamado, los eurodiputados condenaron “la tortura y los malos tratos inhumanos y degradantes infligidos contra José Daniel Ferrer y los demás presos políticos” y reclamaron que se “permita inmediatamente a las familias de las víctimas de la persecución del régimen acceder a ellas, y que las víctimas reciban atención médica”.
La denuncia se suma a la del Parlamento Europeo este jueves, que, como en 2019, volvió a exigir al régimen que ponga en libertad de forma inmediata e incondicional a Ferrer
“La represión debe terminar”, zanjaron los eurodiputados, que solicitaron a la Unión Europea que sancione “a los responsables de las persistentes violaciones de los derechos humanos” en la Isla.
El pasado 7 de septiembre, el arzobispo de Santiago de Cuba, Dionisio García Ibáñez, y el sacerdote Camilo de la Paz, a cargo de la Pastoral Penitenciaria de la diócesis, visitaron en prisión a Ferrer. El encuentro fue dado a conocer por Nelva Ortega Tamayo, esposa del preso político, en declaraciones a Martí Noticias.
Aunque el opositor se encuentra “estable” mental y físicamente, su salud, sin embargo, preocupó al arzobispo y su acompañante, explicó la mujer. “Exactamente, la parte de la salud no está bien”, señaló Ortega al medio, y aclaró que Ferrer le dijo a García Ibáñez y De la Paz que sufría acidez, dolores estomacales y tiene un brazo “prácticamente tumbado”.
En el mismo sentido, el pasado 12 de septiembre Amnistía Internacional, en un mensaje en X, se preocupó por la vida de Ferrer
En el mismo sentido, el pasado 12 de septiembre Amnistía Internacional, en un mensaje en X, se preocupó por la vida de Ferrer, ya que “su familia no pudo visitarlo y desde hace meses han constatado que su salud está gravemente deteriorada por las condiciones inhumanas en prisión”.
Ferrer García fue uno de los presos de la llamada Primavera Negra de 2003, cuando fue condenado a muerte. Entonces, su pena fue conmutada por 25 años de cárcel gracias a las gestiones del Vaticano y la mediación de España.
Durante su actual condena –por intentar unirse a las protestas del 11J–, su familia, en especial su esposa, ha denunciado la constante negativa del régimen a dejar que reciba visitas familiares y conyugales. En numerosas ocasiones, debido a la incomunicación forzada, la familia de Ferrer y algunas instituciones independientes han solicitado una fe de vida del preso político.