Un empleado de seguridad investigado por el robo de bienes patrimoniales

Camagüey/Un empleado de seguridad permanece en prisión por un robo cometido en la Casa Natal de Ignacio Agramonte y Loynaz en Camagüey. Una turista mexicana fue interceptada en el aeropuerto de la provincia intentando sacar algunas de estas piezas del país, pero otras aún permanecen extraviadas.

Una empleada de la Casa Natal de Ignacio Agramonte, que prefirió el anonimato, contó a 14ymedio que "el robo se produjo durante varias noches en el almacén de arte" para evitar alertar de las sustracciones. Un empleado de seguridad de la institución ha sido detenido y está siendo procesado por su presunta implicación en el delito, según la trabajadora.

El pasado 2 de febrero, coincidiendo con el aniversario de la fundación de la villa de Santa María del Puerto del Príncipe, como se llamó inicialmente a esta ciudad del centro de la Isla, los medios locales anunciaron el robo de objetos de valor patrimonial procedentes del museo dedicado al héroe de la independencia más insigne de la región.

Los medios calificaban entonces los artículos como "únicos, inestimables e insustituibles" y los especialistas en museología los consideraron también "joyas" valiosas por su antigüedad

Los medios calificaban entonces los artículos como "únicos, inestimables e insustituibles" y los especialistas en museología los consideraron también "joyas" valiosas por su antigüedad y pertenencia al patrimonio nacional.

Cuatro días después, la Aduana General de la República (AGR) detectó en el equipaje de una viajera mexicana dos de los objetos sustraídos durante el robo: un espejo y un cepillo. La turista iba a salir desde el Aeropuerto Internacional de Camagüey hacia Estados Unidos cuando se hallaron las piezas pertenecientes a la colección del museo.

Ambos objetos fueron restituidos al museo tras una intensa investigación en la que se interrogó a todos los trabajadores y efectuó una revisión minuciosa de los inventarios que desveló la ausencia de otros objetos que aún no han sido hallados.

"La policía detectó que el custodio por las noches manipulaba el sello de seguridad para entrar al almacén", explicó la empleada de la institución. Una práctica común en las instituciones estatales que custodian bienes de algún valor es colocar en la puerta un cordel sobre un trozo de plastilina para posteriormente poder determinar si hubo acceso al lugar.

"El almacén no tenía rejas ni candado aunque ahora sí le pusieron uno", explica la trabajadora. "Ni los empleados saben bien la lista de objetos sustraídos porque se mantiene en secreto", explica, aunque han detectado la ausencia también de "un juego de cucharitas de plata y otros objetos de alpaca".

El custodio detenido está en prisión preventiva sin fianza y a la espera de juicio. Los instructores policiales se encuentran en medio del proceso de recopilación de pruebas para determinar si procede una acusación, según pudo confirmar este diario.

"Ahora está tratándose de determinar si actúo solo o tenía una red de cómplices para poder hacer llegar los objetos a manos de compradores extranjeros interesados", precisó a 14ymedio un oficial de la policía involucrado en el caso. "La prioridad es encontrar lo que falta", precisa.

"El lugar no fue violentado y no había ninguna señal de que el ladrón o los ladrones hubieran llegado desde fuera de la institución, por lo que todo señala a que se realizó el robo en colaboración con alguien de adentro", agrega el oficial de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR).

La directora del museo ha pedido a los trabajadores no hacer comentarios sobre la investigación y ha aclarado que ninguno de los bienes robados pertenecían a Agramonte o sus familiares, sino que eran objetos de la época, que estaban en el lugar como contexto.

El robo se suma a una larga lista de artículos patrimoniales de valor sustraídos en Camagüey en los últimos años. Entre ellos se cuentan varios volúmenes incunables de la biblioteca provincial Julio Antonio Mella, los espejuelos de bronce del monumento a los aviadores españoles Mariano Barberán y Joaquín Collar, además de numerosas esculturas funerarias del Cementerio General del Santo Cristo del Buen Viaje.

Las autoridades aduaneras han advertido de que con el incremento del turismo extranjero que se ha ido produciendo en la Isla en los últimos años ha aumentado también el comercio ilícito de objetos

Objeto de robo de algunas de sus partes también fueron el monumento dedicado a las madres donado por la Gran Orden de La Perseverancia a la ciudad de Camagüey y que estaba emplazado en el parque de arena del Casino Campestre y las campanitas de plata del catafalco del Santo Sepulcro de la Iglesia de la Merced.

Las autoridades aduaneras han advertido de que con el incremento del turismo extranjero que se ha ido produciendo en la Isla en los últimos años ha aumentado también el comercio ilícito de objetos que están considerados bienes patrimoniales.

En 2014 la Unesco condenó enérgicamente varios hechos de este tipo ocurridos en la Isla y añadió que ponían en riesgo la integridad de las piezas patrimoniales y las dejaban a merced del tráfico ilícito de bienes culturales.

Según comunicado un oficial emitido en febrero de ese año por el Consejo Nacional de Patrimonio Cultural de Cuba (CNPC), un número importante de piezas de arte fueron sustraídas de uno de los almacenes del Museo Nacional de Bellas Artes, en La Habana, sin haber sido violentado el acceso al local.

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