Etecsa, principal responsable del fracaso de la bancarización

La Habana/El empleado mueve con agilidad el mouse. Conecta el disco duro que ha traído una cliente y comienza a copiar carpetas con películas, música y videojuegos. El calor y las sucesivas operaciones activan el disipador interno de la computadora y un ronroneo llena el pequeño local, uno de los tantos puntos para comprar el paquete semanal en la barriada de Cayo Hueso, en Centro Habana. En medio de tanta tecnología y archivos digitales que vienen y van, un cartel pegado en el chasis del ordenador aterriza a un mundo más analógico y rudimentario: "No se están aceptando transferencias, problemas de conexión".

Los intentos del Gobierno cubano de extender los pagos electrónicos, pilar fundamental de la llamada bancarización, se topan cada día con infinidad de obstáculos. A la suspicacia de los comerciantes que ven en el dinero virtual una estrategia de las autoridades para tener mayor control y vigilancia sobre sus ingresos, se suman las dificultades con el servicio de datos de la telefonía móvil, indispensable para cualquier operación de ese tipo. "Los inspectores vienen y lo quieren multar a uno porque no tenemos la opción de las compras a través del QR, pero es que hoy todo el día no nos ha funcionado la internet", lamenta el joven mientras cobra en efectivo a una mujer que llega en busca de los más recientes capítulo de una telenovela turca.

En medio de tanta tecnología y archivos digitales que vienen y van, un cartel pegado en el chasis del ordenador aterriza a un mundo más analógico

En buena parte del barrio la situación se repetía. Un mercadito con leche en polvo y aceite vegetal donde los clientes metían la mano en el bolsillo y sacaban un abultado fajo de billetes para saldar la cuenta. Una paladar que en la carta aseguraba que se podía pagar las raciones de ropa vieja y tostones con solo "un clic del móvil" pero que tampoco tenía este viernes conexión a la web. Una tienda de objetos religiosos donde ni los orishas habían logrado que la señal 4G se activara en el celular de la vendedora. Todos, en algún punto de su negocio tenían impreso el dichoso módulo de cuadritos con toda la información para los cobros electrónicos, pero en ningún caso funcionaba.

Ni los 'orishas' habían logrado que la señal 4G se activara en el celular de la vendedora

"No nos pueden echar la culpa a nosotros los particulares porque Etecsa es de los mismos que inventaron esto de la bancarización", opinaba el técnico de un cercano taller de reparación de electrodomésticos. "Ellos inventaron una solución y ellos crearon otro nuevo problema", sentenciaba, mientras una anciana sentada frente a él contaba una decena de billetes de 100 y 200 pesos para liquidar el arreglo de su olla arrocera. A pocos centímetros de la cartera de la mujer, un pedazo de papel ladeado y manchado por la humedad mostraba la enrevesada estructura de un código QR y la quimérica frase: "Rápido y seguro, pague aquí".