Los evacuados por las explosiones en Ti Arriba siguen esperando una explicación
Las autoridades hicieron que los vecinos borraran videos y fotos tomados durante los hechos
La Habana/El Gobierno sigue sin explicar qué sucedió en la Unidad Militar próxima a Ti Arriba, en el municipio Songo-La Maya, donde medio millar de vecinos han permanecido evacuados durante cinco días tras escucharse una serie de explosiones el 5 de junio. Los habitantes del poblado pudieron regresar a sus casas el pasado sábado, según confirmó a 14ymedio una fuente del Poder Popular en esa región de Santiago de Cuba.
Los militares rodearon el perímetro y no permitieron el acceso de ningún residente a los alrededores del enclave de las Fuerzas Armadas, durante varios días. Los vecinos se vieron obligados a salir de sus hogares y buscar refugio en casas de familiares y distintas entidades estatales de la zona.
Pese a ello, las autoridades han minimizado lo sucedido hasta el punto de que la prensa nacional no se ha hecho eco del accidente y, a través de los medios locales oficialistas, ha calificado de "incidente" en el que no ha habido que lamentar pérdida de vidas humanas.
La emisora SM, encargada de difundir esta versión oficial, ha remarcado que los daños materiales fueron mínimos. Sin embargo, los vecinos afectados han visto perjudicado al ganado que quedó sin sus cuidados durante más días de ausencia de los tres que inicialmente estaban previstos.
Labrada también ha denunciado que las autoridades indicaron a los vecinos que se limiten a ratificar la versión oficial de que "no hay pérdidas de vidas humanas ni daños materiales significativos" ante cualquier pregunta
Según Yordanis Labrada, activista de la Unión Patriótica de Cuba que vive en Songo-La Maya, amigos y familiares residentes en la zona aseguran que la policía ha ido "casa a casa" para exigirles que borren los videos y fotografías tomados durante las explosiones.
Labrada también ha denunciado que las autoridades indicaron a los vecinos que se limiten a ratificar la versión oficial de que "no hay pérdidas de vidas humanas ni daños materiales significativos" ante cualquier pregunta o demanda de información sobre lo sucedido.
"La gente está con miedo de hablar y nadie sabe bien qué pasó ahí. Se respira una atmósfera de mucho control", cuenta, vía telefónica, un poblador de Ti Arriba que visitaba a un pariente en Songo-La Maya.
Los vecinos aseguran que esa madrugada las explosiones despertaron a todos los residentes en Ti Arriba y en el cercano poblado de Songo-La Maya. "No fue una sola ,sino una serie de explosiones. Parecía que estaban bombardeando", recuerda Labrada.
Según el activista, los estallidos se prolongaron cerca de cuatro horas y las llamas, que "eran inmensas", se veían desde su casa, a unos 20 kilómetros de la unidad militar.