Fallece Pedro Miret Prieto, miembro de la "generación histórica"
La Habana/A consecuencia de un infarto agudo del miocardio, falleció a los 88 años Pedro Miret Prieto, quien alcanzó los galones de comandante del ejército rebelde a partir de su incorporación en 1958 a la lucha en la Sierra Maestra. La muerte ocurrió en La Habana en las primeras horas de este viernes y sus cenizas serán expuestas en el Panteón de los Veteranos del Cementerio de Colón este sábado, según informaron los medios oficiales.
Considerado como un incondicional de Fidel Castro, Miret nació en 1927 en Santiago de Cuba y formó parte de los asaltantes del Cuartel Moncada en su ciudad natal. Apresado por esa acción, fue condenado y enviado a prisión en la Isla de Pinos.
Ingeniero civil de profesión, se benefició de la amnistía con la que también fueron excarcelados Fidel Castro y Raúl Castro. Partió entonces hacia México, donde participó en los preparativos para la expedición del yate Granma, pero no pudo viajar en la nave por haber sido detenido por las autoridades mexicanas.
Quien alcanzara el grado de comandante en la Sierra Maestra, murió de un infarto de miocardio en La Habana a los 88 años
Hombre de pocas palabras y disminuido carisma, Miret fungió como número dos de Raúl Castro en las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) durante el convulso año 1959. También se desempeñó como ministro de Agricultura y más tarde de Minería, Metalurgia y Combustible.
En el primer congreso del Partido Comunista de Cuba fue incluido dentro del Secretariado del Comité Central y en 1983 también ocupó un puesto en el Buró Político, donde permaneció hasta 1991.
Con su salida en 2009 del cargo de vicepresidente del Consejo de Estado y del Consejo de Ministros que ostentaba desde 1976, se dispararon rumores de problemas con su salud o de una caída en desgracia de su figura. El cese de sus funciones coincidió con las reestructuraciones en el ejecutivo que implementó Raúl Castro a su llegada al poder.
Miret era uno de los pocos miembros de la llamada generación histórica que aún quedaba con vida. Por décadas fue considerado por muchos analistas como un representante de la línea más dura y reacia a los cambios dentro del oficialismo.