La moringa, la última obsesión de Fidel Castro que se procesa en una industria de Sancti Spíritus

La Habana/El "sueño" de Fidel Castro de masificar el consumo de moringa, un árbol procedente de la India con propiedades medicinales sobrevaloradas por el líder cubano, aún no ha muerto. La última invención es la inauguración este sábado de la primera procesadora de polvo de la planta en La Sierpe, Sancti Spíritus.

Ubicada en la Empresa Agroindustrial de Granos Sur del Jíbaro, la planta tiene una capacidad instalada para procesar 20 toneladas anuales del polvo de moringa, cuyo suministro provendrá de 10 hectáreas de plantaciones. Los principales mercados fijados son la industria farmacéutica, la exportación y la venta como suplemento nutricional en la elaboración de galletas.

Concepción Campa, asesora del proyecto, se encargó de recordar el "ambicioso proyecto" de Castro y aseguró que con la puesta en marcha de la planta "se hace realidad ahora otro de sus sueños", según publica la agencia de noticias oficialista Prensa Latina.

La fábrica cuenta con maquinaria austriaca para el secado de la hoja en condiciones de oscuridad hermética, un proceso que evita la desnaturalización de la clorofila y demás propiedades nutricionales del árbol.

Campa señaló que la moringa, conocida por muchos como el "árbol milagroso", tiene varias propiedades como antiinflamatorias y antibióticas, así como es fuente de proteína. Además, añadió la funcionaria, sirve para "curar hasta 300 enfermedades".

"La creación de la planta generará diversos beneficios para la economía local, en primer lugar aportará suplemento nutricional para seres humanos, así como a partir del contenido proteico de la masa verde alimentos para ovinos, caprinos, cerdos y aves", señaló Prensa Latina.

Los principales mercados fijados son la industria farmacéutica, la exportación y la venta como suplemento nutricional en la elaboración de galletas

El cultivo de la planta es un proyecto olvidado, que de vez en cuando es recordado por la prensa oficialista con promesas de un aumento en la producción. En 2021, la Empresa Agropecuaria Bayamo y el Instituto de Investigaciones de Pastos y Forrajes hicieron un estudio en el que encontraron la viabilidad para sustituir la materia prima para el alimento de los animales por pienso criollo a base de moringa.

De acuerdo con ese estudio, la importación de alimentos para el ganado cuesta 550 millones de dólares anuales, un gasto que el país no puede asumir si quiere recuperar también la producción bovina, que cada vez va en declive por la falta de insumos y la escalada de robo. De esa manera, la investigación proponía que elaborar una tonelada de pienso a base de la planta costaría 561 pesos, casi la tercera parte de los 1.500 pesos que cuesta con materias importadas.

La obsesión de Castro por la moringa se originó a partir de 2011, cuando el Gobierno cubano encargó un kilo de semillas a un agricultor canario que, impresionado, le envió dos, según contó la web científica española Sinc. El exgobernante cubano estaba en ese momento convaleciente ya alejado de la vida publica pero se mantenía publicando sus textos en los medios nacionales.

En una de sus últimas y delirantes reflexiones, difundida por la prensa oficialista, Castro escribió que "están las condiciones creadas para que el país comience a producir masivamente moringa oleífera y morera, que son además fuentes inagotables de carne, huevo y leche, (y) fibras de seda que se hilan artesanalmente".

Tras su muerte, en noviembre de 2016, la planta ha perdido protagonismo en la Isla y su consumo se ha visto reducido principalmente a píldoras, té o galletas comercializadas en las farmacias.

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