"Gracias a los reporteros independientes, Cuba ya tiene voz propia"

Madrid/La periodista cubana Luz Escobar, miembro de la redacción de 14ymedio y ganadora del Premio a la Libertad de Prensa del diario español El Mundo, declaró la noche de este miércoles que, gracias a los reporteros independientes, Cuba tiene "voz propia".

La cena de entrega de los XX Premios Internacionales de Periodismo, presidida por Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, se celebró en el Museo Nacional del Prado. Durante la celebración también recibió el Premio Mejor Labor Periodística el reportero ruso exiliado Alexey Kovalev, director de investigaciones del periódico Meduza.

Escobar aludió en su discurso a las dificultades de los cubanos para salir de la Isla, sometidos al control del régimen y "rehenes de un poder que nos trata como niños pequeños a los que se les prohíbe viajar".

Señaló además que, en Cuba, la palabra "periodista" es equivalente a la de "enemigo", y calificó a los medios oficialistas como "espacios propagandísticos del único partido permitido". "En las facultades de periodismo se enseña a reverenciar sin cuestionar al Gobierno y la lista de temas prohibidos supera a aquellos sobre los que se puede indagar y publicar un artículo", puntualizó.

Sobre los peligros de la profesión, Escobar denunció el "estrangulamiento de la prensa" por parte del Gobierno, cuyo objetivo ha sido "imponer una única narrativa sobre lo que ocurría dentro y fuera de la Isla". "Asesinar al periodismo", afirma, ha sido la tarea de quienes llevan seis décadas tramando un "relato triunfalista sobre la situación nacional" mientras atribuían a Europa y el resto de las democracias occidentales un panorama "catastrofista".

Como ejemplos de la manipulación mediática del régimen, la periodista contó el tratamiento de "operación militar especial" que los medios oficiales dieron a la invasión rusa de Ucrania, siguiendo instrucciones directas del Kremlin, que justificaba el conflicto y denigraba a reporteros opositores como Kovalev.

El periodismo independiente nació como alternativa a ese relato, expuso. Según Escobar, sus orígenes están en las cárceles del régimen, "cuando un prisionero político envió el primer pedazo de papel precariamente escrito reportando una golpiza", emitió "una denuncia a través de las restringidas llamadas telefónicas" o "pintó en una pared un símbolo".

Fundadores como el poeta y periodista Raúl Rivero, uno de los condenados durante la llamada Primavera Negra de 2003, o su propio padre, Reinaldo Escobar, censurado por el régimen en 1988, le han servido como inspiración a la hora de asumir el "alto costo personal, familiar y social" de su trabajo.

Escobar denunció los arrestos arbitrarios, las amenazas y los cercos policiales que ha sufrido en su propia casa, además de las campañas de "fusilamiento de mi reputación"

Escobar denunció los arrestos arbitrarios, las amenazas y los cercos policiales que ha sufrido en su propia casa, además de las campañas de "fusilamiento de mi reputación". "Después del 11 de julio de 2021", dijo, "las autoridades cubanas se han vuelto mucho más susceptibles ante la información", además de prestar mayor atención a las redes sociales y a los contenidos de los medios independientes.

Además de una minuciosa represión contra los que manifestaron su deseo de cambio y libertad en esa fecha, el régimen ha forzado a renunciar a su profesión a decenas de reporteros en lo que la periodista calificó como "una vuelta de tuerca de la censura".

Sin embargo, "le hemos hecho añicos al régimen su antiguo monopolio de contar la realidad", dijo Escobar, que también aludió a su trabajo en la redacción de 14ymedio, que no ha detenido su labor "a pesar de la represión, las amenazas y el bloqueo de su sitio web en los servidores cubanos".

El diario ha ayudado a "elevar los estándares de la prensa en la Isla", además de demostrar que "se puede informar y hacerlo con inmediatez y calidad".

Por su parte, Alexey Kovalev, forzado a exiliarse tras una legislación del Parlamento ruso que criminalizó el periodismo independiente, expuso que la guerra de Putin contra Ucrania "está basada en una mentira", por lo que su labor consiste en la defensa de la verdad. El reportero, cuya familia permanece en Moscú, agradeció a El Mundo por su reconocimiento a la importancia de la prensa libre.

En el elogio a los galardonados, Isabel Díaz Ayuso señaló a Escobar y Kovalev como "ejemplos de periodismo como cuarto poder y compromiso con la libertad". "La democracia no es algo que se conquiste para siempre sino que hay que defenderla y no es posible sin libertad de prensa", agregó.

Reclamó que en espacios internacionales es preciso "llamar a las cosas por su nombre", lo cual implica "decir que Cuba es una dictadura y su Gobierno, tirano". En cuanto a Escobar, dijo que además de periodista, era madre, algo que el régimen ha utilizado en su contra. Comentó también que los responsables de El Mundo habían tenido que realizar numerosas gestiones para que la reportera pudiera asistir a la ceremonia con sus hijas.

A la cena de recepción de los premios, organizada por Joaquín Manso y Marco Pompignoli, directores de El Mundo y del grupo Unidad Editorial, respectivamente, asistieron familiares y colegas de Escobar, además de activistas e intelectuales cubanos como Dagoberto Valdés, Yoandy Izquierdo, Yunior García Aguilera, además del político venezolano Leopoldo López, y los españoles Adolfo Suárez (hijo), Inés Arrimadas y Edmundo Bal.

Los invitados asistieron también a la exposición temporal Otro Renacimiento, que recoge en el Museo del Prado la obra de artistas españoles en Nápoles a comienzos del Cinquecento.

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