El 'hombre de la bandera' sale del psiquiátrico después de un año de encierro
Daniel Llorente se encuentra en casa de su hijo, Eliézer y agradece a todas las personas que estuvieron pendientes de su situación
La Habana/Daniel Llorente, el hombre de la bandera, ha confirmado por teléfono a 14ymedio que había salido hoy del psiquiátrico de La Habana. Tuvo que pasar un poco más de un año para que las autoridades tomen finalmente la decisión de liberar al hombre que corrió con una bandera estadounidense en el desfile del Primero de Mayo.
En el momento de la llamada Llorente estaba visitando a su hijo, Eliézer Llorente, quien había sido detenido el pasado 30 de abril y liberado pocos horas después del desfile. La policía política quería evitar que asistiera al desfile del Primero de Mayo y se manifestara públicamente a favor de la liberación de su padre.
"Sobre la una y media de la tarde la subdirectora del hospital viene y me pide que la acompañe y me dijo que ya me iba de libertad, no me dejo despedirme de nadie", cuenta el activista a este diario. Me dijo que me iba de libertad con la condición de que no podía llamar a nadie para recogerme y que la Seguridad del Estado me dejaría en mi casa".
El “disidente por cuenta propia”, que había sido trasladado al psiquiátrico poco después de su detención, ha dicho que se encuentra “feliz” de poder caminar nuevamente por las calles de La Habana y ha agradecido a todos aquellos que estuvieron pendientes de su situación.
Daniel Llorente (1963) se ha destacado por su activismo tras el deshielo diplomático entre Cuba y Estados Unidos. A escasos metros de la tribuna donde estaba el entonces presidente Raúl Castro y delante de la prensa acreditada en la Isla que cubría el evento, Llorente pidió a gritos la libertad para Cuba.
Daniel Llorente (1963) se ha destacado por su activismo tras el deshielo diplomático entre Cuba y Estados Unidos
Su acción espontánea rompió la uniformidad de una coreografía minuciosamente ensayada pero apenas duró unos segundos puesto que la carrera de Llorente fue interrumpida por siete agentes de seguridad que se abalanzaron sobre él y lo redujeron por la fuerza.
Graduado de ingeniería en la antigua República Democrática Alemana (RDA), este habanero terminó ganándose la vida trabajando como albañil, electricista, plomero y taxista privado.
Llorente pasó las primeras semanas de su encierro en la prisión de 100 y Aldabó pero fue rápidamente trasladado al Hospital Psiquiátrico Comandante Dr. Bernabé Ordaz Ducungé, conocido popularmente como Mazorra. En junio del pasado año pidió ser desterrado a Estados Unidos. Tras un año de encierro, Llorente no ha sido acusado de ningún delito ni se le ha celebrado juicio.
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