Un joven cubano-canadiense detenido tras el 11J sale bajo libertad condicional
Michael Carey, de 20 años, fue acusado de lanzar una piedra contra una patrulla
La Habana/El cubano-canadiense Michael Carey, detenido un día después de las protestas del 11 de julio de 2021, salió en libertad condicional, confirmó este viernes la madre del joven, Yvis Abadin, a la periodista Mónica Baró Sánchez, quien subrayó que en mayo termina su sanción.
De acuerdo a datos ofrecidos por Cubalex en sus redes sociales, Carey, de 20 años, estaba sentado en la esquina de su casa cuando dos individuos tiraron piedras y salieron corriendo, mientras que él fue arrestado, una acusación que siempre negó.
Baró Sánchez expuso que en el caso, lo único presentado contra Carey "fue una supuesta prueba de olor a la piedra" que lanzaron contra una patrulla. Sobre la sentencia subrayó: "Pidieron cuatro años de privación de libertad y lo condenaron a dos".
A Carey lo ingresaron en la Prisión de Jóvenes de Occidente del Guatao. Estando en la cárcel se contagió de covid-19 y según Cubalex, en septiembre del año pasado, presentó una tonalidad amarilla. "No se sabe si (el coronavirus) le afectó el hígado o si tiene hepatitis porque no lo han llevado al médico", indicó la organización.
Por este motivo lo mantuvieron aislado e incomunicado. A su madre le negaron las visitas, pese a ello, acudía "todos los miércoles a llevarle sus cosas" hasta que lo liberaron. Carey adelgazó significativamente durante su estancia en la cárcel.
Según el más reciente informe de la ONG Prisoners Defenders, Cuba cerró el mes de diciembre de 2022 con 29 nuevos presos políticos, para un total de 1.057 que sufren condenas judiciales o limitación de libertad.
"El pueblo vive atemorizado y amordazado. Cuba se ha convertido en una gran cárcel para la gran mayoría de la ciudadanía", señala en su informe. Se sigue "hostigando, amenazando, citando y deteniendo a miles de personas, y encarcelando".
Del listado, se precisa que "190 manifestantes han sido acusados de sedición y al menos 175 han sido sentenciados" a un promedio de más de 10 años de privación de libertad cada uno. En tanto que 938 prisioneros políticos han sido sentenciados con penas de hasta cadena perpetua en 18 casos.
En el documento, un punto alarmante es que 31 niños y 5 niñas, en total 36 menores, aún cumplen sentencia (27 de ellos) o están siendo procesados penalmente (9 de ellos). "Buena parte de los menores se encuentran en prisiones presuntamente para menores, pero son centros de carácter totalmente penitenciario que eufemísticamente se denominan Escuelas de Formación Integral".
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