Liberadas y sometidas a una revisión médica las dos intelectuales detenidas por la policía política en Matanzas
Ambas fueron arrestadas cuando iban a La Habana para la marcha de protesta que Alina Bárbara López realiza cada 18 del mes
Madrid/La historiadora y activista Alina Bárbara López Hernández y la antropóloga Jenny Pantoja Torres fueron liberadas horas después de su detención este martes en la estación de Policía de Playa, en Matanzas. Ambas fueron presuntamente golpeadas durante el arresto, según denunciaron la propia Pantoja y la hija de la profesora, Cecilia Borroto López, en sus redes sociales.
"Ya estamos fuera de la policía y vamos camino al médico. A ambas nos golpearon pero sobre todo a Alina. Luego sigo", adelantó la antropóloga.
“Los esbirros siempre utilizando la fuerza bruta, pues odian a quienes tienen mente propia, a diferencia de ellos, miserables adoctrinados. Hay que ser muy enfermos de mente y alma para golpear a dos mujeres mayores y desarmadas. Todo el desprecio de los honestos sobre ustedes y sus actos”, escribió Borroto, que también informó de que ambas se dirigieron al hospital para ser revisadas.
“Los hacemos responsables si algo más llegara a pasar en el trayecto de la estación de policía al hospital y del hospital a mi casa”, agregó, sin dejar de señalar a los agentes. “Sigan exponiendo sus putrefactos rostros bajo la máscara del paternalismo. No somos imbéciles, y cada día más personas son conscientes de su ignominia . (…) Segurosos, la patria no os contempla orgullosa”.
“Los hacemos responsables si algo más llegara a pasar en el trayecto de la estación de policía al hospital y del hospital a mi casa”
A la espera de que las afectadas relaten lo vivido este martes, por Borroto se supo que López Hernández “está siendo instruida de cargos por atentado”. La profesora y Pantoja Torres, que se había ofrecido a acompañarla en la manifestación pacífica que realiza el 18 de cada mes, fueron detenidas antes de llegar al puente de Bacunayagua, en Matanzas, cuando viajaban a La Habana.
“Esperamos que tanto la integridad de Alina como la de Jenny sea respetada como lo merece cada ciudadano. Esperamos que esta vez no decidieran golpearlas, ya que ellos decidieron violar nuevamente el derecho de movilidad”, había expresado Borroto.
Jenny Pantoja había denunciado en sus redes sociales este lunes haber recibido amenazas en su móvil desde el número +53 5 505 1333. “Como llegaste a Matanzas muy bien, te alerto es la última vez que vas a llegar a Matanzas”, decía el mensaje, tan repleto de faltas de ortografía que hizo decir a la activista: “La persona que escribió debe volver a cursar el duodécimo grado”.
"Hago responsable a la Seguridad del Estado, al Gobierno cubano y a sus cuerpos policiales de cualquier cosa que me suceda de aquí en adelante"
Pantoja explicaba en su post que iba a acompañar a López pues no podía dejarla sola “en un viaje a La Habana en el que podría sufrir nuevamente el maltrato policial”. Asimismo, advertía: “Hago responsable a la Seguridad del Estado, al Gobierno cubano y a sus cuerpos policiales de cualquier cosa que me suceda de aquí en adelante. No he cometido delito alguno, ni tengo ninguna causa legal en mi contra. Solo el espíritu y el ánimo presto a hacer lo mejor para mi país que sufre”. Según contó también, su casa se encontraba vigilada por la Policía política.
Alina Bárbara López había anunciado este lunes su intención de trasladar su habitual protesta de los 18 de cada mes a la capital cubana –desde marzo de 2023, centenario de la Protesta de los Trece intelectuales contra la corrupción del entonces Gobierno de Alfredo Zayas–, “para estar en el Parque donde se erige la estatua de Martí”. Sus demandas, detallaba la profesora en una larga publicación en Facebook, eran las mismas de siempre: la elección democrática de una Asamblea Nacional para redactar una nueva Constitución, libertad para los presos políticos “sin exilio obligatorio”, cese del hostigamiento a los ciudadanos que ejercen la libertad de expresión y “que el Estado no se desentienda de la crítica situación de ancianos, jubilados, pensionados y familias que están en pobreza extrema”.
"A los que deciden todo en este país les advierto: si van a detenerme háganlo con una orden oficial de detención"
“A los que deciden todo en este país les advierto: si van a detenerme háganlo con una orden oficial de detención (que debe tener fundamento en una denuncia o sospecha fundada de delito como bien saben)”, desgranó López Hernández, que también responsabilizaba de antemano a la “Contrainteligencia” y el Gobierno “si en esos cien kilómetros que separan Matanzas de La Habana me ocurriera cualquier cosa: un accidente, un asalto, lo que sea”.
La profesora sufrió una detención similar el pasado 18 de abril, también cuando iba rumbo a La Habana y también en el puente de Bacunayagua. López Hernández denunció ante la Fiscalía el atropello, que podía constituir en delitos de “lesiones, privación ilegal de libertad y revelación del secreto de las comunicaciones”.
Mientras tanto, en La Habana, el profesor Jorge Fernández Era, que suele solidarizarse con su colega de Matanzas, informó de que su domicilio se encuentra este martes también sitiado por un operativo policial. Tras enterarse de la detención de su amiga Alina Bárbara y de Jenny Pantoja, subió a la azotea y constató que “desde temprano están en función mía los aguerridos combatientes de siempre, esos que dilapidan lo que no tenemos en vigilar a unos pocos ciudadanos que piensan por cabeza propia”. También la historiadora del arte Miryorli García denunció el acoso de la Seguridad del Estado por solidarizarse con la profesora matancera. En un video difundido en sus redes sociales, se observa a un agente que no le permite salir de su casa. "Supongo que tengan un documento legal que presentarme para defender esa medida de detención en mi vivienda, de prohibición a mi derecho de entrar y salir de mi casa. Si no lo tienen, dejen de hacer el ridículo", sentenció.