Liberado bajo fianza un joven detenido por protestar contra los apagones en Caibarién

La Habana/Dayron Yarisbel García Bolaños, el joven arrestado después de las protestas del pasado 22 de julio en Caibarién, fue liberado bajo fianza este martes. Cientos de personas, entre las que se encontraba García Bolaños, se manifestaron aquel día en el municipio villaclareño, entre gritos y cacerolas, contra los largos apagones que afectan a toda la isla. Durante esa madrugada, el joven fue detenido violentamente en casa de su madre.

Desde que se produjo el arresto, Mario Luis García Marrero, padre de Dayron, ha reclamado varias veces y de modo público su liberación. Este lunes, los padres del joven pudieron reunirse en el Vivac de Caibarién con el fiscal que llevaba el caso. El funcionario les mostró videos de las protestas y otros materiales que involucraban a Dayron.

Luego se entrevistaron con el delegado de su circunscripción. No hubo un diálogo real ni un intento de convencimiento por la razón, asegura García Marrero a 14ymedio, solo discutieron "boberías", que luego se transformaron en advertencias. "Es la forma que ellos tienen para hablar, amenazar o dirigirse a las personas".

"Para ese momento ya se había ido la corriente en Caibarién", de modo que los oficiales le pidieron que esperara a que volviera el fluido eléctrico para poder atenderlo. Anotaron su número de teléfono y le recomendaron volver a su casa. Antes de que acabara el apagón recibió una llamada de la Policía.

"Me dijeron: 'Su hijo se va bajo fianza'", cuenta García Marrero, que tuvo que pagar 1.000 pesos antes de que liberaran a Dayron. "La fiscalía le va a llevar un control por tres meses, y luego decidirán si se le impone una multa o si se cierra el caso. Así va quedando todo".

"La fiscalía le va a llevar un control por tres meses, y luego decidirán si se le impone una multa o si se cierra el caso"

Aliviado por el regreso de su hijo, García Marrero reflexiona que "este pueblo, aparte de hambre, tiene mucho miedo". "Yo nunca había pasado por un proceso de este tipo, con tantas reclamaciones", dice a 14ymedio. "Había vivido el 11 de julio, pero sin enfrentarme a tantas cosas como esta vez. Tampoco sabía de tantas personas que podían apoyar. Yo estaba ajeno a eso".

Aunque espera que "todo se calme y quede ahí", sabe que todos los manifestantes siguen vigilados de cerca por la Seguridad del Estado, pero esta realidad es algo "que el cubano ha aprendido a manejar" sin miedo ni odios.

También desde Villa Clara se conoció que Andy García Lorenzo, uno de los jóvenes procesados tras el 11J en Santa Clara, fue trasladado la semana pasada al campo de trabajo forzado de El Yabú. Según las declaraciones de su hermana, Roxana García Lorenzo, el traslado fue motivado por un "incidente" en el centro penitenciario de Soler, que fue interpretado como "indisciplina" por los supervisores de García.

A través de una llamada telefónica, el joven detenido pudo informar a su familia sobre lo ocurrido. Según explicó su hermana a Radio Televisión Martí, el jefe del campamento de Soler "le llamó la atención por usar una gorra con la que se protege del sol por recomendación del oftalmólogo. A raíz del incidente lo amenazaron con celda de castigo, y fue trasladado a El Yabú".

Andy García está siendo amenazado con la revocación de la medida del trabajo forzoso con internamiento, lo cual podría conducirlo nuevamente a prisión

El viernes pasado, Roxana García Lorenzo denunció en una transmisión en Facebook que las autoridades habían transferido a su hermano a otro campamento penitenciario sin previo aviso a su familia. Se enteraron de este cambio cuando el padre de ambos intentó llevar pertenencias al joven: "De una forma muy ambigua nos dijo un jefe de ahí que mi hermano había sido trasladado para otro centro y no nos dieron explicación para qué lugar era".

Ese mismo día, ella y su madre acudieron a El Yabú, donde está la jefatura de los campamentos de trabajo forzado con internamiento. Después de una hora fueron atendidas. "Ellos nos dieron la seguridad que Andy está ahí", dijo la joven en su video y añadió que pidieron verlo, pero las autoridades se negaron. Les informaron que al siguiente día recibirían una llamada del joven.

"Nos dijeron que a Andy le había subido mucho la presión y por eso había sido trasladado ahí, ya que ahí radica la jefatura, hay una enfermería y podía ser atendido", añadió su hermana. La joven expuso que su hermano es amenazado con la revocación de la medida del trabajo forzoso con internamiento, lo cual podría conducirlo nuevamente a prisión.

Andy García Lorenzo, de 24 años, fue condenado a cuatro años de prisión en un juicio celebrado en Santa Clara el 10 de enero, junto a otros 15 manifestantes que salieron a las calles el 11 de julio del año pasado. La Fiscalía pedía para él originalmente siete años de cárcel por desórdenes públicos, desacato y atentado.

El 25 mayo reciente, el joven fue uno de los presos del 11J que fue liberado en Santa Clara, y seis días más tarde fue detenido nuevamente para seguir con su condena en un campamento.

Su familia también ha sido perseguida en el proceso. En la víspera del 11J, su hermana, su cuñado y el padre de este último también fueron retenidos por la Seguridad del Estado. Los tres fueron interrogados en la Unidad Provincial de Investigaciones Criminales y Operaciones (Upico) en la capital villaclareña, y aunque están en libertad supuestamente hay un proceso de investigación abierto en su contra.

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