Con la libra a 180 pesos, el Estado no puede garantizar el arroz de los cubanos en Fin de Año
En una situación similar están los frijoles, cuyas entregas pertenecen a meses pasados
La Habana/Si los apagones y la falta de dinero no dan tregua a los cubanos este fin de año, tampoco lo hará la escasez de alimentos. A la desaparición de muchos productos de las tarimas tras el ejercicio de control estatal de inicios de diciembre se suma ahora el retraso de varios productos de la canasta básica, la única esperanza de muchas familias para tener una cena navideña.
Según un comunicado del Ministerio del Comercio Interior publicado este domingo, el arroz, el alimento básico de casi cualquier plato en la Isla, sigue repartiéndose en las bodegas las siete libras correspondientes a noviembre, y las de este mes “se asegurarán gradualmente”, añaden sin aclarar si llegarán antes de que termine el año.
Las opciones para adquirir el cereal fuera de las bodegas tampoco alivian la situación de los ciudadanos. Una libra de arroz costaba este domingo, en las tarimas privadas del mercado del Ejército Juvenil del Trabajo en Nuevo Vedado, La Habana, 180 pesos.
El “reto”, explica el ministerio, es “asegurar en el menor tiempo posible, la distribución a las más de 12.000 bodegas del país
En una situación similar están los frijoles, cuyas entregas siguen siendo las de las cantidades correspondientes a meses pasados –y cuestan en los mercados agropecuarios de la capital 350 pesos los colorados y blancos, y 400 los negros– y la sal, aunque está “garantizada”, siguen en proceso de transportación hacia los comercios estatales.
El “reto”, explica el ministerio, es “asegurar en el menor tiempo posible, la distribución a las más de 12.000 bodegas del país, enfrentando los desafíos que imponen las distancias a recorrer y la logística a desplegar para ello”, teniendo en cuenta la falta de combustible. El principal problema, sin embargo, son los escasos productos a repartir, destinados en su mayoría a los más vulnerables.
En el caso de la leche, alimento casi prohibitivo para los adultos en la Isla, están seguras hasta el 10 de enero las cantidades para niños hasta los dos años. “En las provincias Mayabeque, Cienfuegos, Sancti Spíritus, Camagüey y Las Tunas, se entrega leche fluida a los niños de seis meses a un año”, aclara el comunicado, que añade que a los menores entre dos y seis años de Artemisa, Matanzas, Cienfuegos, Villa Clara, Ciego de Ávila, Las Tunas y Granma se les entregará “leche fresca”.
Para el resto, que reciben comúnmente leche en polvo, este mes el Estado ni siquiera pudo garantizar ese producto, que será sustituído por un kilogramo de “mezcla de chocolate para desayuno”.
La lista de alimentos que no estarán en las mesas este diciembre sigue engordando. Es el caso del pollo, que se entregará solo a ancianos, niños menores de 13 años y embarazadas.
El azúcar, con dos libras por consumidor este mes, además del aceite vegetal y la compota, son los únicos productos que tienen cierta estabilidad en la distribución, algo que, atendiendo al precio de esos alimentos en la calle –800 pesos el litro de aceite en Sancti Spíritus y 380 el de azúcar–, evitará que se recientan aún más los bolsillos de muchas familias.
En el caso de la leche, alimento casi prohibitivo para los adultos en la Isla, están seguras hasta el 10 de enero las cantidades para niños hasta los dos años
Gracias a un donativo del Programa Mundial de Alimentos para los damnificados por los huracanes Oscar y Rafael en Guantánamo y Artemisa, se entregarán además en esos territorios 1,5 kilogramos de arroz, 900 gramos de chícharos y un litro de aceite por cada núcleo familiar.
También se repartirán en Sancti Spíritus, Ciego de Ávila, Camagüey y las provincias orientales 2 kilogramos de arroz, uno de chícharos y un litro de aceite a embarazadas y personas vulnerables.
En cuanto al aseo, el ministerio asegura que está en proceso de repartir el jabón y la pasta dental que corresponde al bimestre noviembre-diciembre.
En su conjunto, la lista de productos apenas garantiza una comida completa, y menos una festiva que, al estilo de la Isla, involucra al menos un pedazo de carne de cerdo. Por desgracia, los cubanos que todavía no han asegurado, a través de pagos en dólares o familiares en el exterior, una buena tajada del mamífero, deberán desembolsar en un mercado agropecuario hasta 1.000 pesos por una libra de carne sin hueso.