Mano dura contra bañistas en Cuba: multas de hasta 3.000 pesos
Autoridades de La Habana exigen "mayor" rigor en la aplicación del Decreto Ley 31
La Habana/Entre los anuncios de la reapertura del turismo en Cuba para el próximo 15 de noviembre aún con los riesgos sanitarios que esto implica, la prensa oficialista dio a conocer que del 2 de agosto al 10 de septiembre multó a 1.731 bañistas por "violar regulaciones" y poner en "peligro la vida propia y la de otras personas".
Mano dura contra los bañistas cubanos a quienes les impusieron multas por un monto de entre 2.000 y 3.000 pesos, mientras en el Hotel Internacional de Varadero, uno de los 15 que operan actualmente y con una ocupación al 20%, sus turistas extranjeros disfrutan del sol a la orilla del mar y sin limitaciones.
Apenas en agosto en las redes sociales del complejo hotelero Sol Palmeras, en Varadero, se podía apreciar en imágenes a visitantes extranjeros disfrutando de la playa sin alguna restricción sanitaria.
La delegada del Ministerio del Turismo en Matanzas, Ivis Fernández Peña, afirmó el 8 de septiembre a la agencia AFP que "lograron convertir" a Varadero en un refugio de sol y playa. Desde abril sólo el "0,1% de los más de 50.000" turistas recibidos dieron positivo a covid-19, insistió.
Apenas en agosto en las redes sociales del complejo hotelero Sol Palmeras, en Varadero, se podía apreciar en imágenes a visitantes extranjeros disfrutando de la playa sin alguna restricción sanitaria
Granma retomó la información de las multas a bañistas e hizo hincapié en que es una medida para hacer frente a "indisciplinas en zonas de playa" con la aplicación del Decreto Ley 31, que regula el protocolo en la actual etapa.
Los infractores, se dijo, fueron "detectados" en la intersección de calle 1ra. y 70, en La Puntilla y en la playita de 16 y La Concha, "situación que se incrementa los fines de semana", con el despliegue de la policía en los municipios de Playa y La Habana del Este.
Incluso está prohibido sentarse en el emblemático muro del Malecón o transitar siquiera por la acera más próxima al mar, una medida que ha azuzado el encono de los habaneros, acostumbrados a pasar largas horas recibiendo la brisa marina, encontrando amigos o escuchando algo de música en el que llaman "el banco más largo del mundo" con varios kilómetros de largo.
Por su parte, Tribuna de La Habana además dio referencia de 63 personas multadas en "La Habana del Este, incluyendo el Reparto Camilo Cienfuegos, y 51 en el municipio de Playa". Por lo que el presidente del Consejo de Defensa en la capital, Luis Antonio Torres Iríbar, y el gobernador, Reinaldo García Zapata, exigieron "mayor rigor" a las autoridades y llamaron a "la ciudadanía a respetar las medidas y normas sanitarias".
La Habana, una ciudad costera con una antigua tradición de baños en su litoral, ha atravesado el cálido verano con sus playas y su Malecón cerrados a los que quieren darse un chapuzón, incluso si solo quieren acercarse a las aguas para refrescarse en medio de la intensa canícula.
El cierre de las Playas del Este a los bañistas, las más populares de la capital, ha sido un duro golpe a todo el entramado económico de poblados como Santa María, Boca Ciega y Guanabo, en los que buena parte de las familias viven de rentar habitaciones, servir comida o gestionar otros divertimentos para los que llegan buscando una tranquila jornada frente al mar.
La Habana, una ciudad costera con una antigua tradición de baños en su litoral, ha atravesado el cálido verano con sus playas y su Malecón cerrados a los que quieren darse un chapuzón
En lugar de eso, Guanabo se ha convertido prácticamente en un pueblo fantasma, en el que los pocos restaurantes y cafeterías que siguen ofreciendo sus servicios al público solo lo hacen para llevar y no permiten a ningún cliente sentarse en sus locales. Las arenas son patrulladas constantemente por uniformados que advierten a quienes llegan que no pueden bañarse.
Estas estrictas restricciones han sido muy cuestionadas no solo por quienes señalan el devastador efecto económico que tiene en el entramado privado de la zona sino que también recuerdan que los lugares abiertos y ventilados son los de menor riesgo para contagiarse por covid-19. Los críticos cuestionan que se mantengan abiertas las tiendas estatales a puertas cerradas y con larguísimas colas, mientras se penaliza a las familias que quieren disfrutar de la brisa marina.
Según información del Ministerio de Salud, en los últimos siete días, La Habana ha registrado 40 muertes por covid-19 y 4.028 contagios. Este viernes reportó 501 casos y cuatro fallecidos: dos en Boyeros, uno en Marianao y uno en San Miguel del Padrón.
Las sanciones dadas a conocer este mes se suman a las 549 impuestas entre febrero y julio de este año por los órganos de control y supervisión del gobierno de La Habana y la policía. La mayor incidencia se detectó en los consejos populares de Guanabo y Cojímar.
En julio de este año se desmintió la presunta apertura de playas. El 21 de ese mes las cifras de la pandemia arrojaban 1.222 contagios por covid-19, para un total de 7.745 casos. "Cuando la situación epidemiológica del territorio mejore y se apruebe el acceso a dichas áreas la noticia será debidamente informada por los medios oficiales pertinentes", se publicó en las redes del gobierno capitalino.
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