La medicina natural, víctima del derrumbe de la producción agrícola en Cuba
Faltan ajo, cebolla, orégano, sábila, azúcar o alcohol, además de 15 materias primas importadas
Madrid/El énfasis en la medicina natural, más marcado en los últimos años en que se ha agravado la escasez de medicamentos, puede estar llegando a su fin. El derrumbe de la producción agrícola está arrasando también con jarabes, cremas y todo tipo de medicamentos sin químicos que se elaboran en Cuba, según se desprende de las declaraciones de Dixsan Rojas Cruz, director de la Empresa Provincial de Farmacias y Ópticas de Camagüey.
En una nota publicada en el diario provincial Adelante, el directivo explica que “la falta de estos productos en la red de farmacias se debe por una parte a los excesivos precios de materias primas como el ajo y la cebolla, lo que imposibilita su compra, y a la falta de otros elementos necesarios para producirlos”.
El medio señala que en la mayoría de las farmacias de la provincia escasean los jarabes de cebolla y orégano y las cremas, aunque se salvan, de momento, otros productos, como las gotas antitusivas, extractos y tinturas, o muralla (jazmín de café), una planta con antiinflamatorias y antioxidantes.
Cuba se ve obligada actualmente a importar gran parte del azúcar que precisa para su población
Entre los problemas para producir estos medicamentos no solo está la falta de la planta base. Se precisan hasta 15 materias primas importadas, añade Rojas, además de alcohol –para extraer los metabolitos activos de las plantas– y azúcar, básica para la elaboración de jarabes y cuya escasez es sobradamente conocida en Cuba. La Isla, mundialmente célebre durante décadas por la producción cañera, se ve obligada actualmente a importar gran parte del azúcar que precisa para su población y es incapaz de cumplir con los contratos de exportación.
Para octubre, la empresa espera recibir un cargamento de azúcar con el que lograr el objetivo de producción en los dos centros que posee, uno en la ciudad cabecera de la provincia y el otro en Nuevitas, además de 32 laboratorios en farmacias en los que también se arrima el hombro para cumplir con las proyecciones.
En el caso de los jarabes, hay un problema añadido: la falta de frascos. El plan de producción anual para Imefasma –un jarabe para la tos a base de jengibre y miel– es de 370.000 recipientes, de los que solo se han elaborado el 26%. En general, para todos los medicamentos incluidos en el programa de Medicina Natural y Tradicional, se han fabricado 3.445.000 frascos, de los 6 millones previstos, un 56%, según Alexander Padrón Hechavarría, especialista de la Empresa Provincial de Farmacias y Ópticas.
El texto menciona el Herbals-4, un medicamento creado precisamente en Camagüey y basado en los principios activos del plátano, la sábila y la majagua que ha tenido éxito entre la población. En sus primeros cinco meses de vida se vendieron más de 17.000 unidades de este antitusivo.
El texto menciona el Herbals-4, un medicamento creado precisamente en Camagüey y basado en los principios activos del plátano
“La medicina natural y tradicional –argumenta Fernando José Estévez Cabrera, jefe provincial del Programa en la provincia– es una excelente opción para tratar múltiples enfermedades, inclusive es mucho más efectiva que la medicina occidental para las fracturas óseas y tumores benignos. Países altamente desarrollados como Francia o Alemania la usan en más del 60% para el tratamiento de sus pacientes”, asegura.
Aunque la nota está centrada en los medicamentos elaborados a partir de plantas, cuyos principios activos han sido útiles a lo largo de la historia y en muchos casos están validados por el método científico, el funcionario los mezcla con otros productos pseudocientíficos, como la homeopatía y las flores de Bach, ambas consideradas no solo inútiles sino un timo por la comunidad espacialista.
Entre las pseudociencias que aparecen en el catálogo del programa de Medicina Natural y Tradicional cubana están también la ozonoterapia, la acupuntura, la digitopuntura y las ventosas.
El pasado mayo, el Ministerio de Finanzas y Precios publicó una resolución para aumentar los precios de los productos naturales al considerar que era muy difícil cubrir los costos. En su nota de este jueves, Adelante afirma que “crece su consumo” y que “aunque llamarlos alternativa ante la escasez de fármacos convencionales sería depreciar, no es menos cierto que sí alivian de manera significativa su ausencia”. Con los datos actualmente disponibles, la alternativa también amenaza con dejar de serlo.