Los mototaxis ruedan por Camagüey
Camagüey/Pintorescos y llamativos, los mototaxis irrumpen en el paisaje de la ciudad de Camagüey para intentar aliviar el servicio de transporte local que apenas cubre el 44% de la demanda, según datos de la Empresa Provincial de Ómnibus Urbanos del territorio.
Los nuevos vehículos de tres ruedas, de fabricación China, con motor y capacidad para seis pasajeros, han sido arrendados por el Estado a cooperativas de transporte. Las rutas, con un precio de 4 CUP, parten desde dos puntos de la ciudad: el Casino Campestre y la Terminal de Ferro-Ómnibus, enclavada en el centro histórico.
Los choferes deben pagar mensualmente unos 8.000 CUP, un importe en el que se incluyen el alquiler del vehículo al Estado, la gasolina y la Seguridad social
Los primeros de estos mototaxis que circularon en el país lo hicieron en las calles de Sancti Spíritus desde finales de 2015 y posteriormente su servicio llegó a la ciudad de Santiago de Cuba. Los equipos, de la marca china Lomgim, han sido ensamblados en la Isla.
Los choferes deben pagar mensualmente unos 8.000 CUP, un importe en el que se incluyen el alquiler del vehículo al Estado, la gasolina y la Seguridad social. A cambio reciben una capacitación previa por parte de especialistas de la Dirección Provincial de Transporte y un uniforme de la empresa Taxis-Cuba.
"Estos son los primeros 15 triciclos de los 105 asignados para nuestro territorio", explicó recientemente a la prensa oficial Rafael Ramos Jiménez, director en Camagüey de la Agencia Taxis-Cuba, que destacó que los recorridos actuales "incluyen los principales hospitales y centros educacionales".
Esas rutas serán cubiertas obligatoriamente en los horarios de 6 a 10 de la mañana, y de 2 a 6 de la tarde, pero durante el resto del día los vehículos arrendados pueden moverse a diferentes destinos dentro de la ciudad.
"Todavía están muy caros y son pocos para mejorar la necesidad real del transporte en Camagüey", considera Roberto Salazar, un cliente que a diario se desplaza hasta el reparto Monte Carlos. "Los coches con caballos son más baratos (3 CUP) y siempre hay en las piqueras, mientras que desde que empezaron los mototaxis solo he visto pasar uno y estaba lleno".
Los cocheros privados tampoco ven con buenos ojos a sus nuevos competidores. "Para el Gobierno de la ciudad somos una espina clavada y nos han obligado a ir solo por las calles más malas", se queja un conductor de un vehículo tirado por caballos.
"A cada rato nos echan encima a los inspectores, pero al final somos los que estamos resolviendo el problema del transporte". El trabajador por cuenta propia opina que se necesitan más de 150 mototaxis para lograr hacerles competencia. "Y veremos si lo logran", agrega incrédulo.
"Los coches con caballos son más baratos (3 CUP) y siempre hay en las piqueras, mientras que desde que empezaron los mototaxis solo he visto pasar uno y estaba lleno"
La ciudad, con una población superior a los 350.000 habitantes y unas 80.000 personas que se trasladan diariamente, solo cuenta con poco más de 60 ómnibus en funcionamiento, muchos de estos de limitada capacidad, como los Dianas.
Reinier Rodríguez, que lleva más de seis años conduciendo un bicitaxi, considera que el nuevo vehículo todavía no tiene un "impacto negativo" sobre su bolsillo. "Nosotros llegamos hasta los barrios donde ellos no van".
Sin embargo, si la cooperativa de mototaxis logra mantener los precios iniciales, puede que los transportistas privados tengan que bajar los suyos. Rodríguez, sin embargo, confía en que el nuevo servicio no alcance las metas anunciadas. "Aquí las promesas se quedan en promesas", añade.